Diversas mesas de especialistas han desarrollado un sábado lleno de contenido cultural.
Todo comenzó con una conferencia sobre la reproducción genética, a cargo del veterinario y profesor universitario Antonio Gómez Peinado, en la que señaló, entre otras cosas, que ya en España «se ha clonado un toro bravo, concretamente de Guardiola».
Posteriormente, la mesa compuesta por Manuel Escribano, Ricardo Gallardo, Tomás Entero, Ana Romero y Javier García Baquero profundizó en los cambios que necesita la fiesta, en la que todos los ponentes solicitaban la «verdadera unión del sector como cambio radical».
Antes del paréntesis del mediodía, se proyectó una intereantísima película de Rogelio Delgado, La Soledad del Triunfo, film dedicado al triunfo de los toreros y todo el mundo que les rodea.
La primera conferencia de la tarde versó sobre Los Toros y su Jurisprudencia, a cargo del jurista Joaquín Moeckel, quien disertó sobre la existencia de varios reglamentos en el toreo, lo que catalogó de «no demasiado lógico», y también afirmó que el arte «está por encima de la reglamentación».
Posteriormente, La Mirada Femenina del Toreo, una mesa cien por cien femenina, que recogió la diversidad de opiniones sobre el papel que desarrolla la mujer en el mundo del toro. Lea Vicens, Mónica Alaejos, Ana Alonso, presidente de la Federación Andaluza de Mujeres, Verónica Jiménez Fortes y la moderación de Elena Salamanca. «La tauromaquia es un mundo masculino», concluía la mesa, «pero la mujer cada vez tiene más peso específico».
La enriquecedora historia del mayoral francés Fabrice Torrito, de Albaserrada, fue el siguiente punto en el desarrollo de las jornadas. La historia de un francés afincado en Sevilla que alcanzó el sueño de ser mayoral.
Cerró la jornada del sábado una mesa bajo la advocación del arte de torear: Dávila Miura, Rafael Tejada, Juan Carlos Gil, Carlos Crivell y la moderación de Laura Tenorio. Todos coincidían que para ser torero «hay que tener un puntito», y que la tauromaquia «aporta unos valores esenciales para hacer la faena de la vida».