El pasado domingo, Julián López “El Juli” se despedía de los ruedos con una tarde memorable en la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. El maestro madrileño, que un día antes decía adiós a Las Ventas saliendo a hombros de ésta tras dejar momentos emotivos ante un toro de El Puerto de San Lorenzo, dejaba horas después sobre el ruedo maestrante toda una demostración de poderío. Un poderío que ha llevado a gala durante su trayectoria.
Días antes, estaba presente en los micrófonos del programa El Toril, de Onda Madrid en una entrevista que publicaron en diferido el pasado domingo. Y, en ella, desvelaba datos sobre su futuro.
El Juli: «En el futuro, si hay algo, será en otra etapa totalmente distinta a esta»
PREGUNTA- ¿Qué le han dicho sus hijos?
RESPUESTA- Son pequeños todavía, pero están en una edad en la que ya han visto lo que significa ser torero, la dureza… me voy en un buen momento para ellos. Porque saben lo que he sido, lo que hay que hacer para ser torero, lo que se sufre y lo que se disfruta. Es una edad buena para que disfruten de un padre para ellos. Considero que es un momento bueno; ellos están contentos porque saben del peligro que evito no toreando y están contentos de haberlo podido vivir también.
Estará encantada Manoli…
Están felices mis padres. Se gana mucho en calidad de vida, porque tu familia sufre ucho por esto. Toda tu vida está hipotecada por la tauromaquia: tus viajes, tus vacaciones… y la sensación en la familia, lógicamente, es de una tranquilidad tremenda.
¿En qué ha cambiado el toreo?
Cuando empecé había una bonanza taurina, una cantidad de festejos, no había el lastre social y económico por el tema político y el falso animalismo… había antitaurinos, pero no esta radicalización de todo. Y la bonanza económica la viví en el momento más grande. Y ahora es un proceso difícil en el toreo; si antes se valía por sí sola, ahora tiene que evolucionar y pensar cómo llegar a la gente joven. El toro ha ido a mejor, porque ha evolucionado en un 200% desde el toro que me encontré hasta el toro con el que me voy. Y la cantidad de toreros con corte diferente, porque todo tipo de aficionados tiene su torero. Como positivo a esta época, veo que el sector taurino se ha concienciado de que debe haber unión, promoción, evolución… el mundo del toro está “condenado” a una tremenda evolución que debe ser la que lleve la tauromaquia a lo más alto.
¿Y a partir de ahora qué?
Tengo proyectos, pero la sensación de torear no la va a suplir nada. Se termina una etapa y ahora viene la propia vida. Nunca he querido hablar de retirada. No me quiero comprometer con la palabra retirada. Siempre lo he visto y lo veo como el final de una etapa en la que no tengo una idea fija de futuro ni de que vuelva o no vuelva a torear nunca. Le tengo mucho respeto a cómo me ha tratado todo el mundo y no se puede ir a la ligera en estas cosas. De momento hemos cerrado esta etapa, quiero hacer otras cosas y solamente el futuro podrá decir algo. Pero lo que sea, si hay algo, será en otra etapa totalmente distinta a esta.