ENTREVISTA

El Soro: “La manifestación de Valencia tiene que ser una primera piedra para otra en Sevilla y Madrid”


jueves 18 febrero, 2016

Humano en el toreo, torero fuera de él, porta en el alma y en la rutina la goma de atar lechugas que siempre llevaba mientras toreaba para recordar la dureza de la huerta. La dureza de la vida.

Humano en el toreo, torero fuera de él, porta en el alma y en la rutina la goma de atar lechugas que siempre llevaba mientras toreaba para recordar la dureza de la huerta. La dureza de la vida.

JAVIER
FERNÁNDEZ-CABALLERO

Nadie, jamás, llevó a
Valencia tan en su corazón como Vicente Ruiz «El Soro”. Humano en el toreo,
torero fuera de él, porta en el alma y en la rutina la goma de atar lechugas
que siempre llevaba mientras toreaba para recordar la dureza de la huerta. La
dureza de la vida. Ahora, de nuevo asume el reto de reaparecer el día 16 de
marzo: una gloria para Valencia y para la Fiesta, pero todo un infierno previo
el que está pasando el de Foios. Una preparación de locos es la que lleva ese
músico nada cuerdo que decidió, hace doce meses, anunciarse en la calle de
Xátiva junto a Ponce y Manzanares para cruzar el umbral glorioso de su afición.
La que nunca le falló.

«Estoy preparándome con mucha
intensidad en la finca «Las Azores”, de mi amigo ganadero valenciano Rafael
Azol, cerca de la localidad sevillana de Castillo de las Guardas. Estamos día y
noche subiendo cerros, toreando vacas, poniéndonos a punto física y
psicológicamente para ese gran día que será el 16 de marzo
”, afirma entre sollozos el maestro. No tiene
fin su día. Tampoco la tiene una noche como centinela de su destino. Y eso lo
sabe y lo siente aquel que un día decidió sentirse torero aun en su debilidad.

«Mentalmente me encuentro muy
bien, en un momento óptimo, al 80% de mi recuperación física total y perdiendo
bastante peso. Llevo a cabo una dieta rigurosísima, pero tengo una calidad de
vida fantástica gracias precisamente a esa preparación. Espiritualmente me
encuentro muy bien, y el poder de la mente tiene mucha fuerza, porque junto a
la oración y al trabajo voy a llegar y a conseguir mi meta”
. Es listo. No tira sólo del poder terrenal
para ser fuerte: su estampita de la Virgen de los Desamparados es oppidum para
la encarnizada lucha de estar óptimo con las dos promesas de Valencia, Jesús
Duque y Román Collado.

«Yo tenía mucha ilusión de poder
torear junto a estos dos jovencísimos matadores valenciano. Tanto Román como
Duque tienen frescura, tienen condiciones y tienen en su mano la oportunidad de
torear una, a priori, excepcional corrida de Capea. Para mí es tremendo estar
en este cartel, compuesto por un torero que se va y dos que llegan con fuerza.
Mi carrera va descendiendo y la suya ascendiendo”,
afirma sobre el acartelamiento con estos dos
importantes toreros de la savia nueva taurómaca. El uno, Román, tiene
apalabrado confirmar en Madrid por San Isidro; lo de Duque es seria duda, pero
llegará su momento capitalino.

Así lo confirma el
maestro levantino, adelantando además que su temporada se presenta como el rito
de las tardes elegidas: «Torearé en torno a ocho o diez corridas,
todas aquellas en las que me ilusione el cartel y las circunstancias. Iré
viendo cómo me voy encontrando delante de la cara del toro, iré viendo cómo me
encuentro ante el público y las empresas. Creo que soy un torero que puedo ir a
gusto a cualquier cartel, y esa es una baza que debo defender en los próximos
meses. Lo que está claro es que El Soro vuelve con todo el arsenal pirotécnico
valenciano para hacer una auténtica mascletá el próximo 16 de marzo en mi
tierra”.

Y Valencia el 13 de
marzo tiene, sin duda, la gran cita social del año para la Fiesta: una
manifestación que se estima reúna a casi 50.000 persona gritando y alzando la
voz para que esta maldita yihad contra nuestra libertad cese de una vez. No nos
la merecemos. Y saldremos públicamente a decírselo a los políticos: «Todos
tenemos que estar en esta manifestación el día 13, una manifestación a favor de
la Fiesta que sea un ¡Basta ya! rotundo. Nos está avasallando este tipo de
personas que no creen en nuestras raíces, en nuestra cultura y en nuestra forma
de entender la vida. Tiene que ser una manifestación para decir que el que no
quiera que no vaya, pero que nos respeten y respeten nuestra libertad de
hacerlo con total legalidad. Creo que no pueden quitar esta identidad española,
tanto del Bou al Carrer como del toro en la plaza. Es algo arraigado a nuestra
cultura que hay que respetar como nosotros respetamos otro tipo de cultura”.

Valencia, la plaza por
la que un día el romántico Simón apostara, vuelve a ser y estar en boca de
todos porque paulatinamente ha ido mimando a su abonado. Esa corrida de Adolfo
Martín, honra ganadera a la diversidad de encastes, verá un llenazo en un
cartel que, a priori, podría haber acogido una media entrada si no fuera por el
acontecimiento social de la manifestación. «Además con un cartel bonito, con
Rafaelillo, Manuel Escribano y Paco Ureña. Espero que haya un llenazo y sea un
reclamo importantísimo .Que sea una manifestación histórica en los anales del
toreo, que sea el punto de arranque para que luego se haga otra en Sevilla y
otra en Madrid para que ya quede concretado que el toreo es cultura, está
apoyado por una masa importante de la sociedad y que debe ser respetada. No
dejen de venir. Estamos necesitados de cariño y hay que aprovechar este momento”.

Si alguien tintaba de
loco a El Soro cuando hace doce meses afirmaba que él, solo él y José Tomás
eran los únicos capaces de llenar de expectación y de «No Hay Billetes” por sí
solos una tarde de toros se equivocaba. Me equivocaba yo también al afirmarlo.
Ahora Vicente me devuelve la pelota: «Así es. Habrá un llenazo absoluto con dos
toreros locales. Todo el tirón y la fuerza caerá sobre mis hombros. Ojalá
salgamos los tres a hombros junto al ganadero. Están llamando bastantes
empresas ya a mi apoderado, Javier Vázquez, pero no voy a poner número a mis
corridas, sino a la calidad de éstas. Seguiremos trabajando para llegar con la
máxima condición óptima para ese día tan importante como será el 16 de marzo”.

En un mediodía frío y
taciturno segoviano nació el fruto del presente. El Club de aficionados de la
ciudad se reunía en enero para homenajear a dos toreros dispares en cuanto a
trayectoria pero similares en cuanto a concepto temporal. El Soro y Javier
Vázquez volvían a reunirse como amigos y se iban de aquella cita como
compañeros profesionales, como apoderado y poderdante. «Javier es un hombre muy serio,
muy capacitado para hacer lo que quiera en el mundo del toro. Es un apoderado
chapado a la antigua y tiene un buen ejemplo y un apoderado en común como
Manolo Lozano. Javier no tiene techo en este mundo del toro, conoce todos los
entresijos de la Fiesta y la vive con todo el amor del mundo. Se preocupa mucho
pro el torero, lo vive de verdad. A parte, me une una amistad entrañable con
él. Lo conozco desde hace muchos años y qué mejor que un torero entienda a otro
torero”.

El Soro, además, apuesta
por la tierra. También fue hábil aquella tarde de julio de 2015, y mientras
Valencia lo mecía en vítores aun a pesar de estar de chaqué y en el callejón,
echando la vista cual lince al mejor de los seis novilleros de la Feria. Vino
apoderando a uno y se fue apoderando a otro. Vino, vio, y eligió a Cristian
Climent como el mejor y más joven exponente del sorismo de los ochenta en la
actualidad: «Es un torero con mucha frescura, con una calidad humana tremenda y un
torero excepcional. Le caben muchas tauromaquias, es muy capaz y tiene un punto
de personalidad especial. Tiene su ramificación sorista, pero también su poso y
su propia firma delante del animal. Hará el paseíllo el 14 de marzo con la
novillada de El Parralejo junto a Álvaro Lorenzo y Ginés Marín y espero que sea
una gran tarde, porque es mi torero y le tengo un cariño fuera de lo normal”.
Rubrica
el maestro. Gracias por este rato, Vicente. Gracias por este trato, Soro.

FOTOGALERÍA: JAVIER COMOS