Aida Jovani es una joven ganadera de la provincia de Castellón que, junto a su padre Pedro Jovani, mantiene la llama viva de la afición y, sobre todo, la personalidad del encaste que profesan sus toros: el de Guateles, una rama muy particular de la parte de Domecq. Con ella hemos charlado sobre el pasado, presente y futuro de un hierro que se está erigiendo como fundamental en festejos menores en esta tierra y en otros territorios, amén de festejos populares.
Aida Jovani: «Buscamos un toro que permita disfrutar al ganadero, al torero y a la afición»
P – Estamos hablando con una de las ganaderas más jóvenes de España ¿cómo te entra el veneno del toro bravo?
R – Buenas tardes, en primer lugar, me gustaría agradecerles esta entrevista. Siempre es un honor que el mundo taurino se acuerde de las mujeres y sobre todo de la juventud. Pues el veneno del toro bravo me viene por mi padre. Es cierto que me gustaría mencionar que mi abuelo paterno, en paz descanse, asistía a festejos populares. Posteriormente mi padre continuó con esta afición por los festejos populares en los pueblos y poco a poco se fue decantando más por el toreo de plaza. Hasta que decidió comprar la finca «La Fonteta» donde fundó el hierro de Jovani. Entonces prácticamente cuando yo nací ya fue entre toros y de ahí mi afición.
P – Una ganadería iniciada por tu padre, que no tenía ningún antecedente ganadero en la familia. Todo viene por afición.
Sí, la verdad es que es digno de admirar. Mi padre, sin ningún antecedente en la ganadería, se aventura en este mundo, donde con esfuerzo, dedicación y constancia va construyendo la ganadería y el toro que busca. Un toro que permita disfrutar al ganadero, al torero y a la afición. Es el espejo donde me miro, creo que juntos tiraremos hacia adelante de un proyecto que no ilusiona sobremanera.
P – Segunda generación ganadera de la casa, sin duda un orgullo pero también una gran responsabilidad.
R – Cierto, es una responsabilidad dado que seguir en la línea en la que la ganadería se encuentra actualmente es todo un reto para mí como ganadera joven. Pero que no dudo que con el apoyo y asesoramiento de mi padre conseguiré continuarla. Si bien es cierto que la responsabilidad hoy en día no es muy grande, sé que con el tiempo todo irá a más. Ahora la tenemos más como disfrute que como negocio, de ahí que la presión en cierto modo no sea tan grande.
«Guateles tiene unas particularidades muy especiales»
P – Un hierro con una sangre muy especial: Guateles, un tipo de toro con personalidad propia.
R – Así es, son animales con mucha movilidad, transmisión y que durante la faena van siempre de menos a más. Guateles tiene unas particularidades muy especiales. Es un toro que aún siendo de la rama Domecq tiene grandes diferencias. A mi francamente es un toro que me llena. Las cosas están saliendo bien y poco a poco vamos dando pasos para que la ganadería tenga esa regularidad que buscamos.
P – Una vez que te involucras en la ganadería pasas a tener una visión más especifica de ésta. Esas decisiones de las que nos hablabas tendrán una relación directa con el toro que buscas.
R – Así es, el toro que busco, o más bien el toro con el que soñamos tanto mi padre como yo, es aquel que sea estético morfológicamente, que agrade al torero, y sobre todo que embista y haga disfrutar a la afición. El toro que con sus embestidas te emocione. Creo que el toro bravo está en un punto muy bueno, los ganaderos han conseguido criar a un animal muy bravo. En una ganadería cada decisión que tomas tiene una consecuencia a medio o largo plazo, de ahí que tengas que ser muy consecuente con lo que haces. Yo poco a poco voy entendiendo más a la ganadería, aquí uno nunca deja de aprender.
«Soy una persona exigente: me gusta que mis animales transmitan y humillen»
P – Se dice que el ganadero trata de transmitir en los genes que selecciona su propio concepto de la vida. Entiendo que ese concepto de toro va marcado por un tipo definido de embestida en Aida Jovani.
R – La verdad es que me defino como una persona exigente y eso es lo que me gusta exigir a mis animales. Animales que transmitan, que humillen, que tengan movilidad y nobleza. Yo, pese a buscar el mismo toro que mi padre, no soy igual que él, esos matices son los que hacen que una ganadería tome un rumbo u otro. El toro es el fiel reflejo de su ganadero, eso es lo que le dota de personalidad.
P – Dicen que el torero además de serlo tiene que parecerlo, algo así debe pasar con el toro bravo, ¿no?
R – Por supuesto, el toro bravo debe tener unas hechuras bonitas para serlo, aunque en ocasiones los menos bonitos también embisten. Aquí existe una disyuntiva entre hechuras o comportamiento. Pienso que tiene que existir un equilibrio, pero lo que tengo claro es que busco un toro que entre por los ojos y que sea fiel al encaste que tengo, eso sí, si un toro me da ese salto que necesita la ganadería voy a dejarlo pese a que sus hechuras no sean las mejores, ya intentaremos afinar el tipo con la selección.
P – Normalmente estamos acostumbrándose a ver ganaderías bravas en otras zonas de la península, cuéntanos un poco como es criar toros bravos en vuestra zona, que peculiaridades tiene.
R – La verdad que resulta complicado, puesto que las extensiones de terreno y los pastos no son como las dehesas andaluzas o salmantinas. Aquí criamos a los animales con pienso desde pequeños. Pero es lo que hay, en la zona de Levante las fincas son menos extensas, aquí es más complicado manejar el ganado a caballo, pero nos amoldamos. Las grandes dehesas que hay en otras partes de España son espectaculares, pero yo ando enamorada de mi rincón.
P – Poco a poco vais metiendo la cabeza en las novilladas, supongo que la idea es dar pasos cortos pero seguros.
R – Esa es nuestra filosofía, dar pasos cortos pero firmes. Somos conscientes de lo complicado que resulta este mundo, por ello no queremos precipitarnos en nada. Lo importante es seguir trabajando y luchando como lo estamos haciendo y desvivirnos por el mundo del toro. Gracias a Dios ya se han pisado plazas de responsabilidad con resultados buenos, pero tenemos los pies en el suelo y sabemos que esto es muy largo. Como te dije antes nuestro objetivo ahora es disfrutar de la ganadería e ir puliendo el toro del futuro».
Aida Jovani: «Creo que son tiempos difíciles para el ganado bravo, pero yo confío en el trabajo que estamos haciendo»
P – Nos hablaste de tus raíces, de tu relación con el toro bravo, del concepto que tienes como animal, pero, ¿qué le puede aportar Aida Jovani a su ganadería?
R – Puedo aportarle ilusión exigencia y carácter que, sobre todo, es lo que me define. Siempre se dijo que en la juventud está el futuro. Yo tengo una afición enorme, siempre que puedo vengo a la finca. Creo que son tiempos difíciles para el ganado bravo, pero yo confío en el trabajo que estamos haciendo.
P – Sabemos de tu amor por el campo, los animales y tu ganadería, pero también que estás «liada» en unas oposiciones, ¿cómo compagina Aida Jovani la cría del toro bravo y los estudios?
R – Pues la verdad que es difícil, una oposición requiere de mucho sacrificio y muchas horas, igual que el mundo del toro, pero siempre que puedo saco un ratito para disfrutar de lo que más me gusta, los toros, es mi forma de evadirme.