TEMPORADA 2023

El matador que se ha enfrentado este año a la Unión de Toreros para poder ‘ver pitón’ tras siete años sin torear


martes 28 noviembre, 2023

El torero extremeño se reivindicó y actuó en la pasada Feria de Cenicientos a pesar de que la Feria se sometió a una huelga por las asociaciones profesionales

Jairo Miguel
Jairo Miguel, liándose el capote de paseo en Las Ventas. © Luis Sánchez Olmedo

La de torero siempre ha sido una profesión muy complicada cuando las cosas salían a la contra, en la que infinidad de espadas se veían postergados al banquillo sin saber si podrían salir de él. En todas las épocas del treo ha existido una problemática que dejaba a muchos espadas sin la oportunidad de demostrar su valía, o de al menos, poder buscarse la vida. Esto obligó a un gran número de de diestros a cambiar el oro por la plata, cambiando muchos de ellos radicalmente su vida.

Pero dentro de esta profesión hay toreros que prefirieron decir no y seguir preparándose en la soledad del campo sin ver un pitón fuera de las plazas de tientas. Pese a tener una gran condición física y mental, no basta; es decir, el torero, por muy preparado que esté, necesita del contacto con el público y el animal, de lo contrario se pierde rodaje, algo que se nota delante de la cara de los animales. Este fue el caso de Jairo Miguel, un espada que pasó de ser niño prodigio a estar orillado.

Pero como a todos, a él le llegó esa oportunidad que tanto esperaba. Fue el pasado mes de agosto en Cenicientos, plaza donde trenzó el paseíllo para matar una corrida de Partido de Resina. Jairo fue uno de los nombres que se reivindicó y actuó en la pasada Feria de Cenicientos a pesar de que la Feria se sometió a una huelga por las asociaciones profesionales, Un espada volvía a ver un pitón tras siete años, enfrentándose a una huelga que amenazaba con volver a frenar su carrera.

Pese a esa reivindicación, el teléfono no sonó como esperaba tras dar un golpe sobre la mesa en una plaza de gran seriedad como Cenicientos. Polémicas aparte, el extremeño vio la oportunidad y se aferró a ella. Opiniones al respecto hay muchas, unos a favor y otras en contras, pero si algo queda claro en toda esta película es que cada uno escribe su propia historia y Jairo Miguel únicamente tenía clara una cosa: “En mi hambre mando yo”.

«No tengo mucho más que decir, porque quiero estar al margen de todo, básicamente porque a mí nadie ha venido a mi casa los años que he estado sin torear a darme un pitón ni a ayudarme a salir de la situación que tengo. Yo voy siguiendo mi camino, sin hacerle daño ni mal a nadie. En este caso, no es que hayan quitado a otro torero para ponerme a mí, sino que se les ha presentado en la que me han ofrecido torear, y yo estoy necesitado de eso y es lo que haré», defendía el joven en el mes de agosto en declaraciones a este medio. Y salió airoso de la tarde, ya que ha sido declarado como el triunfador de la Feria de la localidad madrileña.

Jairo Miguel
Jairo Miguel en el patio de cuadrillas de Cenicientos. © Ángel Bravo