Pese a la finalización de la Feria de San Isidro, el foco del mundo del toro sigue estando presente en la primera plaza del mundo, coso donde el próximo domingo trenzarán el paseíllo Paco Ureña, Emilio de Justo y Borja Jiménez, en la Corrida In Memoriam, homenaje a Victorino Martín. Luego vendrá la corrida del día 22, con Luis David Adame, Molina y Christian Parejo en el cartel, dando paso a las novilladas nocturnas de los jueves, que tanta expectación levantan siempre en el aficionado.
Hace unos días, este medio avanzó parte de los hierros que se lidiarán en el verano venteño, una serie de espectáculos taurinos que tendrán su continuación con el ciclo torista de septiembre, la tradicional Feria de Otoño y el festejo de la Hispanidad. Pero, a diferencia de otras temporadas, Madrid parece que no cerrará sus puertas ese 12 de octubre, reservando una fecha posterior para la celebración de un festival taurino en homenaje a Antonio Chenel “Antoñete”.
Tal y como avanza Charo Pérez en ABC, se trata de un festival organizado por el sevillano José Antonio Morante de la Puebla, espada que ha sellado una rotunda Feria de San Isidro con un corte total de tres orejas en dos tardes. Un torero que ha demostrado con creces que mira más por el futuro de la tauromaquia que por el suyo propio. Ya en pandemia se echó el petate de la fiesta, anunciándose en un ramillete de cosos cuando la tormenta todavía estaba encima. En 2022 sumó más de cien paseíllos en una temporada histórica, en la que apostó por la apertura de carteles, anunciándose en todo tipo de plazas con hierros de diversa índole.
Ha sido base de los distintos festivales celebrados en la capital hispalense desde hace más de un lustro, y pieza indispensable en la vuelta de Canal Sur a la Real Maestranza de Caballería de Sevilla durante este Ciclo Continuado de 2025. El sevillano también donó a la Casa de Misericordia la totalidad del Premio Nacional de Tauromaquia, interesándose además por los nuevos utensilios de la lidia (puya, banderillas, espada…) creados por Manuel Sales, mostrándose muy receptivo a la hora de implementarlos en plazas de Andalucía.
Ahora daría un paso más con la celebración del citado festival en la primera plaza del mundo. “Será en octubre. La Comunidad y la plaza ya nos han dado el visto bueno”, explicaba al citado medio. Nombres para el cartel hay muchos, pero deben ser espadas que tengan una especial relación con el diestro madrileño. “Quiero algo diferente. Que sean toreros importantes —que lleven tiempo sin torear— y que la gente quiera ver”, recalcaba el espada sevillano.
Como ocurre tantas veces cuando se quiere organizar un festival en una plaza de enjundia, esto supone un problema para aquellos espadas que llevan años retirados. A la palestra salen nombres muy ligados a la afición madrileña: Joselito, El Juli o César Rincón —ahijado predilecto del maestro madrileño— son algunos de ellos, estando también marcado en rojo Curro Vázquez, gran amigo de Chenel y apoderado de Morante durante un tramo de su prolífica carrera.
Pero de esa lista, alguno ha declinado la propuesta, y José Antonio busca convencer a aquellos que todavía pueden subirse al barco para estar presentes en una tarde tan especial. Según avanza ABC, uno de los nombres fijos es el de Uceda Leal, matador de toros que paseó una oreja en la corrida de La Quinta hace unos días en la primera plaza del mundo. «Si no conseguimos otros, los demás ya serán toreros jóvenes…», explicaba un espada que anda trabajando en un cartel que esté a la altura de una figura tan importante como lo fue Antoñete.
Pero no todo se limita a un festival. Hace algunas semanas, en una entrevista concedida a Vicente Zabala de la Serna, este le confirmó el rumor que pululaba por los mentideros taurinos sobre el levantamiento de un monumento al diestro madrileño junto a la primera plaza del mundo: “Echo de menos un monumento a Chenel en los alrededores de la plaza. Es una de mis ilusiones, y no quiero que se me escape”, respondía tajantemente Morante de la Puebla.
Pero ahí no quedó su respuesta, dejando claro que incluso ya se habían dado los primeros pasos para ello: “Hemos encargado ya una maqueta. Es muy él, con el pitillo en la mano”. Un monumento que iría ligado a la celebración de un festival homenaje a un torero irrepetible. “Antoñete ha sido un torero muy bueno. Un espada especial, bohemio, hondo y puro.”, comentaba el diestro hispalense en la citada entrevista del pasado mes de mayo en El Mundo.
