NATALIA GIL / FOTOGALERÍA: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO
El joven matador de toros
afronta la temporada con mucho realismo, asegura a CULTORO que no será nada fácil
pero que su entrenamiento y dedicación le permitirá plasmar su sello personal
en el toreo. No confirmar alternativa ha provocado una decepción pero también
un acicate para seguir luchando por sus sueños.
Tras tomar la alternativa el
año pasado, ¿cómo está siendo tu carrera como matador de toros?
Al llevar poco tiempo como torero no han sido muchos
los festejos lidiados hasta el momento. Esta nueva etapa es de ir poco a poco,
de ir despacio, intentando crecer, asimilar y sobretodo madurar para cuando
lleguen las grandes citas estar preparado.
Has iniciado la temporada
2016 con un festival en Candeleda y una corrida en Valdemorillo en el mes de
febrero, ¿con qué momentos te quedas de aquellas tardes?
No fueron tardes fáciles pero si algo tengo que
destacar es la actitud que tuvo el primer toro en Valdemorillo hasta que cogí
la espada. Intenté plasmar mi forma de sentir el toreo. No ha sido un buen comienzo, no estoy contento,
soy consciente que me falta mucho, que tengo mucho que pulir y en ello estoy
trabajando.
¿Qué objetivos te has fijado
para este año?
Mi objetivo principal es crecer como torero, vivir
cada tarde con la máxima intensidad sin olvidar el ir poco a poco. Creo que
esto es una carrera de fondo y que no ha hecho más que empezar.
Este sábado 23 de abril a
las 5 y media de la tarde harás el paseíllo en Tomelloso con el rejoneador Juan
Manuel Munera y los toreros Curro Díaz y Morenito de Aranda, ¿qué esperas de
esta nueva tarde?
Para mi es una tarde importante, en mi situación
todas las tardes lo son. Voy con la ilusión de torear entregándome y espero poder
dejar una muestra de lo que quiero hacer en el toreo. Plasmar mi sello y seguir
avanzando.
¿Hay nuevas tardes ya
firmadas para ver a Francisco José Espada?
No estoy mucho en eso, creo que hay cosas habladas. Lo
que sí intuyo es que va a ser un difícil. Por eso, de lo que más me preocupo es
de entrenar y prepararme para poder estar a la altura. Ahora tengo la mente puesta
en la corrida del sábado.
Has comenzado esta temporada
prescindiendo de los servicios de Taurodelta, ¿por qué se ha producido esta
ruptura?
Estoy muy agradecido a la empresa Taurodelta pero,
quizás, los objetivos no se han cumplido por ninguna de las dos partes. Ahora tengo
la suerte de contar con César Jiménez que está conmigo y me apoya. Prefiero
emprender un camino junto a él y esperamos que juntos podamos conseguir muchas
cosas.
En los carteles de San
Isidro no aparece Francisco José Espada…
Mi ilusión era estar en Madrid y para ello me he
preparado durante el invierno pero las circunstancias no lo han hecho posible. A
la vez que ha sido una decepción también ha sido un acicate para seguir
mejorando, entrenando y preparándome. Madrid es la plaza de mis sueños, he
tenido la suerte de vivir allí dos de las tardes más importantes de mi vida. Mi
ilusión y mi mente siempre están puestas en esa plaza y ojalá pueda estar allí pronto.