ENFERMERÍA

García-Padrós: “Lo primero que me ha dicho Gonzalo es que cuándo va a salir para poder torear”


lunes 14 octubre, 2019

Lo primero que le ha dicho Gonzalo Caballero -que sigue en estado “muy grave”- al doctor García Padrós ha sido que cuándo va a volver a torear. Ahora el problema es su cuadro de insuficiencia renal .

Lo primero que le ha dicho Gonzalo Caballero -que sigue en estado “muy grave”- al doctor García Padrós ha sido que cuándo va a volver a torear. Ahora el problema es su cuadro de insuficiencia renal .

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO

Lo primero que le ha dicho Gonzalo Caballero -que sigue en estado “muy grave”- al doctor García Padrós esta mañana ha sido que cuándo va a volver a torear. El pasado sábado sufrió una tremenda cornada en la plaza de toros de Las Ventas dentro de la corrida de la Hispanidad de la que fue operado durante casi tres horas en la enfermería venteña y posteriormente en el hospital San Francisco de Asís, pero ahora el problema es el cuadro de insuficiencia renal que tiene.

“Tiene un cuadro de insuficiencia renal debido a la tremenda pérdida de sangre. Tras las transfusiones que se han puesto, está siendo tratado por los nefrólogos”, explica el doctor, que ha estado hablando esta mañana con él y se encuentra dolorido, “pero solamente piensa en cuándo va a salir del sanatorio para volver a coger los trastos”, explica el doctor.

“Hay que esperar porque son muy pocas horas desde que se ha realizado la segunda operación.  Se ha despertado la pasada noche de la sedación como si se hubiese despertado de cualquier otra operación. Ahora tiene dolores y tiene la pierna inflamada como corresponde”, detalla García-Padrós.

En la enfermería, según llegó, “le pusimos un torniquete y dejó de sangrar en la cantidad que lo hacía en la plaza. Él mismo se metió la mano en la herida, lo que hizo que cayese menos sangre, pero perdió más de dos litros en el trayecto hasta la enfermería”, sigue relatando sobre los críticos momentos de la cornada y de su llegada a la enfermería.

Allí, la operación se alargó durante dos horas y media. “Todo fue muy laborioso, porque las venas desgarradas se escondían entre los músculos. Cuando soltabas el torniquete, veías que sangraba pero no veías el punto exacto en el que lo hacía”, reseña sobre lo complicado de la intervención,

Posteriormente se procedió a la segunda operación con el equipo del Doctor Gandaria. A esta hora, su estado sigue siendo “muy grave”.

FOTO: LUIS SÁNCHEZ OLMEDO