La afición de hispalense aún recuerda con nostalgia aquel 30 de abril de 2011, una fecha histórica para La Real Maestranza de Caballería de Sevilla que tuvo como protagonistas al toro ‘Arrojado’ de Núñez del Cuvillo y al torero alicantino José María Manzanares. Un animal de unas excelsas cualidades que se ganó la vida gracias a su bravura y su nobleza. Como todo indulto, este también levantó la lógica polémica, sin duda la salsa de esta fiesta.
Este animal del hierro gaditano estaba marcado con el número 217 y pesó 500 kilos, era negro, tocado de pitones, bajo y bien hecho, un toro que cuajó de pitón a rabo que le tocó a Manzanares en su encerrona, un torero que tuvo en 2011 el mejor año de su carrera. Indulto en Sevilla, Puerta Grande en Madrid… una temporada donde se erigió como el torero más destacado tras rayar a una gran altura en plazas como Valencia, Bilbao o la añorada Barcelona.
Sobre su comportamiento, el ganadero Álvaro Núñez comentó en su momento «Me he echado a llorar viéndolo embestir antes del indulto, porque el toro embestía con una entrega absoluta, con una bravura muy de verdad, con el concepto que nosotros perseguimos”. Por su parte, Manzanares lo definió de este modo una vez concluida la faena: “El toro ha sido extraordinario, ha tenido clase, ritmo, he disfrutado una barbaridad con él. Ha sido como un sueño, aún no me lo creo. Me ha permitido torear con el alma, como yo sueño».
En su primer año como semental, ‘Arrojado’ dejó preñadas a 48 de las 57 vacas que su ganadero había preparado para él
En su primer año como semental, ‘Arrojado’ dejó preñadas a 48 de las 57 vacas que su ganadero había preparado para él. En el cerrado de ‘Vega de la Pepita’ vivió libre y a cuerpo de Rey, un animal que ya es historia tanto de la ganadería como de la tauromaquia. Pero apenas se le molesta. Se pega la vida padre con su tropa de vacas y en esta espléndida finca no le falta la hierba: zulla, morcillero, vallisco, tréboles… las hierbas clásicas de esta zona de La Janda en torno al monte de ‘El Grullo’ donde esta vacada se reparte entre las fincas de ‘El Grullo’ y ‘El Lanchar’.
Hace algunos años, cuando ‘Arrojado’ aún vivía, Curro Orgambides se dio un salto por la emblemática finca gaditana para conocer más sobre él, la vida que se le venía por delante y el tipo de vacas idóneas para este animal: “Nosotros miramos mucho las hechuras, la encornadura, el carácter… Y por eso le echamos un tipo de vaca con mucho temperamento, no de su línea porque hay que refrescar las sangres, y vacas también con menos cara porque el toro está muy bien armado como se ve” comentó el ganadero al Diario de Cádiz.
Tres años cubriendo vacas
Los toros tienen una esperanza de vida de entre 12 o 15 años, y ‘Arrojado’ cubrirá vacas durante toda su existencia», comentaba un ganadero que dos tres más tardes del indulto vería como este animal fallecía en la propia finca gaditana tras desarrollar paratuberculosis. Una noticia que entristeció sobremanera a unos ganaderos que estaban empezando a ver los productos de este toro como semental.
Tres años estuvo cubriendo un toro que dejó su simiente en una ganadería donde su clase aún está vigente. Uno de esos animales que aún se recuerdan en la casa, fue aquel grandioso ‘Lanudo’ de vuelta al ruedo al que José Tomás le cortó el rabo en Jerez el día de su reaparición en 2016. Años atrás el torero de Galapagr ya había aprobado como madre a su bisabuela, una vaca que supo transmitir su genética a este animal hijo de y ‘Arrojado’ y ‘Lanuda’.
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FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Jerez de la Frontera. Lleno de ‘No hay localidades’
Seis toros de Núñez del Cuvillo, de correcta, armónica y pareja presentación. Salvo el desclasado y rajado quinto. El segundo de nombre ‘Lanudo’ e hijo de ‘Arrojado’ fue premiado con la vuelta al ruedo en el arrastre.
Juan José Padilla (Azul noche y oro): Ovación y dos orejas
José Tomás (Verde esmeralda y oro): Dos orejas y rabo y oreja
José María Manzanares (Azul marino y oro): Dos orejas y silencio tras aviso
Años después de su muerte, ‘Arrojado’ vuelve al lugar donde se ganó la vida
Ahora, años después de su muerte, ‘Arrojado’ vuelve al lugar donde se ganó la vida. Según comentó el matador sevillano Eduardo Dávila Miura en los micrófonos de MundotoroTV, la cabeza de este histórico toro ya se encuentra en un lugar privilegiado de La Real Maestranza de Caballería de Sevilla, un lugar donde todos los visitantes podrá disfrutar de su presencia y conocer la historia del primer toro indultado en esta plaza en la época moderna.
Otro de los toros que estará expuesto en un sitio privilegiado de La Maestranza será ‘Cobradiezmos’, uno de los animales más bravos que se han lidiado en Sevilla a lo largo de su historia. Así lo hizo saber su ganadero a los presentes en un acto el pasadoaño en el Salón de Carteles de La Real Maestranza de Caballería de Sevilla: «Una vez que -por viejo- ‘Cobradiezmos’ muera, volverá al lugar donde se ganó la vida«.
«Cuando ‘Cobradiezmos’ muera, será disecado y entregado a la Real Maestranza, aunque espero que tarde mucho en venir», se expresó entre risas el ganadero extremeño en un acto donde también tuvo palabras de agradecimiento el propio torero de Gerena, Manuel Escribano: «Aquella tarde, sin ti, nada hubiera sido posible Victorino Martín«. Una preciosa historia entre un torero y una ganadería que tendrá un nuevo capítulo el próximo sábado 22 de abril en esta misma plaza, esta vez junto a dos compañeros como son Manuel Jesús ‘El Cid’ y Emilio de Justo.