ENTREVISTA

Israel de Pedro: “El toro tiene que ser más exigente y tener más poder en el caballo”


martes 7 marzo, 2017

El segoviano, dueño también de una cuadra de caballos de picar con su mismo nombre, acompañó en 2016 a David Mora en el año de su reaparición, además de a otros toreros y novilleros

El segoviano, dueño también de una cuadra de caballos de picar con su mismo nombre, acompañó en 2016 a David Mora en el año de su reaparición, además de a otros toreros y novilleros

JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO

Israel de Pedro está en capilla: esta noche
acudirá a los premios del Foro de la Juventud Taurina en los Teatros del Canal
de Madrid esperando ser elegido como mejor picador de la temporada 2016. El
segoviano, dueño también de una cuadra de caballos de picar con su mismo
nombre, acompañó en 2016 a David Mora en el año de su reaparición, además de a
otros toreros y novilleros para terminar cruzando la barrera del medio centenar
de festejos haciendo el paseíllo. Nos lo cuenta.

En primer lugar, ¿qué balance haces de tu
2016 y con cuántos festejos exactos terminaste la temporada?

Ha sido
una temporada muy bonita, porque mi matador reapareció y además le salieron las
cosas muy bien en Madrid. David, más que mi jefe, es mi amigo, sólo por ese
motivo todo fue ilusionante. Además he ido con novilleros y otros toreros,
terminando con 55 festejos, un número extraordinario.

A parte de David Mora, ¿con quién toreaste?

He
toreado en un mano a mano y seis toros de Bautista, Javier Herrero, Juan
Miguel, Javier Marín, Alejandro Gardel… y otros nombres que se me olvidan.

En líneas generales fue un año importante y
que te hace acreedor de uno de los premios con más glamour del mundo del toro,
¿con qué te quedas?

Ha sido
un año bonito porque las cosas salieron bien, llevándome algunos de los premios
de la feria de San Isidro. La línea del año fue buena. Uno trabaja para que
todo sea mejor, pero uno trabaja para que sea bonito y bueno.

¿Cómo fue «Malagueño” en el caballo?

Fue
bravo el toro. Se vino las dos veces pronto y muy derecho, se empleó y dio
juego.

En cuanto a este 2017, supongo que pleno de
ilusión al lado de David Mora.

Empezamos
en Vistalegre el pasado 25 de febrero, y estamos plenos de ilusión para la
temporada de 2017.

¿Cómo ves el sector del toreo en el campo de
los picadores?

Yo lo
veo desde una doble perspectiva: aparte de compañeros tengo una cuadra de
caballos y comparto muchos momentos con muchos picadores. Hay un buen momento
de muy buenos profesionales. Hay una tendencia en el toro de querer moverse
más, de querer tener más poder, y eso ayuda a que la lidia del picador sea más
importante. Mejorar o cambiar debe cambiar el toro, tiene que ser más exigente,
con más poder… porque bravo es muy bravo. En la línea de los caballos hay que
intentar buscar el equilibrio caballo-toro para que el tercio de varas sea lo
más llamativo posible. Hay que darle al público los alicientes. De esa forma
también conseguimos eso.

Además compaginas ser picador con la faceta
de preparador de caballos, explícanos cómo es la cría del caballo de picar.

Criar
no crío, compro potros, los domo y los preparo para torear con mi cuadra.

¿Qué principales dificultades conlleva esa
preparación?

La
falta de festejos, aunque llevamos tres años y hemos hecho más de 40 festejos
en estos años. No es mi idea abarcar más. Pero el principal problema que yo
encuentro es en algunos festejos falta de profesionalidad de algunos picadores.
Que haya intrusismo afecta.

¿El túnel influye mucho?

Lógicamente.
Si tú tienes que pagar lo mismo a todo el mundo, intenta llevar a los mejores. Si
hay otros baremos para que lleves a unos o a otros, eso influye en la falta de
profesionalidad y en que el espectáculo no sea lo ñas redondo que tiene que
ser.