CAMPO BRAVO

La línea jabonera recuperada por Juan Pedro Domecq: la gloria que ‘Ilusión’ dio al hierro sevillano


viernes 13 diciembre, 2024

Esta historia, que tuvo lugar a finales de los años 80 gracias a la perseverancia de María Teresa Morenés de Urquijo, ha hecho que la ganadería recuperase a capa jabonera.

Juan Pedro Domecq
El célebre toro "Ombú", lidiado en 2018 en Las Ventas, y a la izquierda una vaca jabonera de Juan Pedro Domecq con su becerro. © Plaza 1 y X

Muchas son las historias que esconde el campo bravo, esas que salvo en contadas ocasiones no salen a la luz por celo de sus ganaderos. Pero con el tiempo estos han ido poco a poco desvelando esas historias que han servido para acercar al aficionado a las ganaderías. Nombres como Lancero, Decidor, Pocopelo, Ganador, Ilusión o Bullicioso han marcado un antes y un después en hierros tan importantes como Torrestrella, Luis Algarra, Santiago Domecq, Núñez del Cuvillo o Juan Pedro Domecq.

Dentro de esa amalgama de sementales hoy nos quedamos con un astado que es historia en la ganadería sevillana. Tres años después de la muerte de Juan Pedro Domecq y Díez en 1975 y tras 35 años de existencia, es su hijo mayor el que decide emprender el camino que diez años antes había tomado su tío Salvador. Juan Pedro hereda el hierro de la V de Veragua y la parte proporcional que le correspondía de la ganadería, amén de cuatro becerros seleccionados por él y aprobados como sementales en la vacada que pastaba junto a la Laguna de la Janda. Viendo que no contaba con cierta genética acudiría a su tío Salvador para buscar esa líneas que le faltaban y así cerrar definitivamente su ganadería.

Dentro de animales que componían su proyecto ganadero no abundaba el pelo jabonero, ese que con el tiempo se iría perdiendo por la selección natural de la ganadería. Por todo ello fue Dña Teresa Morenés de Urquijo -mujer de Juan Pedro Domecq Solis- aquella que dio un paso al frente para la recuperación de una capa que ya no veía en los cercados de la divisa hispalense, esa que con los años regaría los campos a ambos lados del charco gracias a la venta de toros y pajuelas a América.

El 40 Ilusión, nacido en 1990, y de pelo melocotón, fue el responsable de la recuperación de la capa jabonera en el hierro de Juan Pedro Domecq. Una historia que tiene como protagonista a la madre del actual propietario de la vacada sevillana, una mujer que convenció a su marido y a su cuñado Salvador Domecq Solís para conseguir que este pelaje volviera a estar presente en la ganadería familiar.

Sin Título
La vaca ‘Pardilla’, número 919. La belleza y la policromía. © X

Una hermosa historia que narraría Juan Pedro Domecq Morenés en el programa Por las Rutas del Toro emitido hace unos años en Toros de Movistar: “Ha sido un animal emblemático por su color, porque era un toro melocotón -jabonero en colorao-, un pelo que prácticamente se había perdido en mi casa. Un color típico en este encaste que hizo de Veragua su capa emblemática, esa que ya no teníamos en casa”.

La llegada del pelo jabonero tiene una figura esencial como bien nos cuenta el propio ganadero: “Mi madre siempre tenía la ilusión de tener alguna vaca jabonera y conseguir así que no se perdieran un pelo tan carismático de la ganadería de Veragua. Y bueno, buscó, le insistió a mi padre, pero al final, es mi madre aquella que consigue que mi tío Salvador le regale una vaca de este pelaje. Esa hembra estaba herrada con el número 380, una vaca que venía de las Gacetilleras, de los Primorosos y Cuidadosos, pero por esa tremenda ilusión que hacía la vuelta del pelo jabonero a la ganadería mi padre le puso como nombre Ilusión”, comentaba el ganadero afincado en la finca Lo Álvaro.

Tras este regalo, Juan Pedro Domecq Solís sabía perfectamente el camino que debía tomar para enraizara ese pelaje nuevamente en la casa: “Vaca a vaca es tremendamente lento, por eso mi padre lo que hace es buscar un semental jabonero, y la primera cría que tiene esa 380 Ilusión se la echa al 83 Humorista, esta tiene un macho y cuando este tiene la edad se mete en la plaza. Fue ese 40 Ilusión el que hizo que el color jabonero esté presente hoy en día en toda la ganadería” explicó Juan Pedro Domecq Morenés al citado programa televisivo.