Abre el cartel el novillero de la Escuela del Yiyo, Jarocho, reciente triunfador de la Feria de San Isidro y que llega a Algete con la mente puesta en la Gran Final. Asegura que en este momento de su carrera “procuro disfrutar de cada entrenamiento, cada novillada y estoy notando la evolución de este último tramo”. Ser uno de los primeros del escalafón conlleva una presión añadida “algo que siento, pero me ilusiona luchar por ser capaz de enseñar el toreo que llevo dentro”. Quiere ver los tendidos de Algete llenos de aficionados, a los que les augura “una bonita tarde, en la que van a disfrutar y estoy seguro de que habrá muy buen nivel por parte de los tres”.
Cid de María actuará en segundo lugar. El líder de la clasificación de semifinales destaca “el momento de aprendizaje y de hacer bien las cosas en la plaza” en el que se encuentra actualmente. No va a cambiar su ambición de cara a esta última fase “voy a seguir como venía este tiempo atrás y a demostrar por qué he llegado hasta aquí”. Si tiene que definir su sentimiento a la hora de enfundarse el traje de luces, lo sentencia en “coraje y corazón”. Y un mensaje claro para los aficionados: “en Algete no dejaré indiferente a nadie”.
Cierra Adrián Centenera, quien asegura que se encuentra “en un momento personal y profesional muy bueno, en el que disfruto cada momento, creyendo en mi trabajo y con constancia”. Un novillero muy completo, “ilusionado porque noto a los aficionados conmigo y eso hace que cada vez que salgo a la plaza, de un punto más en cada faena”. En Algete verán a un Adrián Centenera “renovado, con mucha hambre por torear y ser feliz haciendo lo que más amo en esta vida”.
La ganadería Hermanos González pasta en la sierra madrileña, en el término municipal de Moralzarzal y es un hierro fijo en el Circuito de Madrid. El año pasado ya lidiaron en la misma tarde que en la presente edición, la Final a Tres, en ese caso en Cercedilla y donde resultaron triunfadores. Llegan a este sábado con tres novillos parejos, dos castaños y uno negro, bajos y con caja.
Por su parte, la ganadería Los Eulogios entró a última hora a esta novillada. Estaba reseñada para la gran final pero la falta de novillos de una de las ganaderías propició el cambio. Este hierro pasta en la localidad madrileña de Colmenar Viejo. Presente en todas las ediciones del certamen, el año pasado lidió en la Gran Final. Su ganadero, Manuel Sanz de la Morena lleva toda la vida dedicado a su hierro, dándole forma a la ganadería a base de trabajo y dedicación.