Después de diez años como matador de toros, y muchos más dedicados a perseguir el sueño de triunfar en el toreo, Duque cierra esta etapa de su vida para abrir una nueva, como Jesús García, el hombre detrás del torero. A partir de ahora, afrontará con ilusión nuevos proyectos personales y profesionales, poniendo el mismo corazón y dedicación que lo caracterizaron en los ruedos.
En un emotivo comunicado, escrito en primera persona, el torero de Requena comparte con sus seguidores esta trascendental decisión.
Comunicado:
«La vida nos regala primeras veces, pero también nos enfrenta a las últimas. Y esta temporada, tras una década como matador de toros, ha llegado el momento de despedirme de los ruedos.
Desde los 12 años, he entregado cada minuto de mi vida a esta pasión que ha sido, es y será siempre mi razón de ser. El toreo me ha dado todo, y gracias a Dios he tenido la fortuna de crecer y forjarme en una de las profesiones más duras, pero también la más bella.
Agradezco a todas las personas que, de una forma u otra, estuvieron a mi lado en este camino. Cada uno ha dejado una huella imborrable en mi carrera. Gracias a ustedes, hoy soy no solo el torero, sino también el hombre que siempre soñé ser.
No puedo despedirme sin expresar mi agradecimiento a quienes me apoyaron tanto en los momentos de triunfo como en los más difíciles. A mi peña taurina, a todos los que creyeron en mí y, sobre todo, a mi familia, que ha sido siempre mi pilar incondicional. Espero haber logrado emocionarlos y transmitirles la felicidad que yo mismo he sentido, porque sin ustedes, nada de esto habría sido posible.
Hoy cierro una etapa colmada de emociones, alegrías y momentos irrepetibles. Ha sido, sin duda, la más hermosa de mi vida, y la llevaré siempre en mi corazón.»