El diestro sevillano Juan Ortega hace doblete en Barcelona. Ayer lunes, junto al periodista de La Vanguardia Joaquín Luna en el Círculo Ecuestre y esta tarde en el Hotel Oriente, acto organizado por UTYAC.
Doscientas personas llenaron hasta la bandera el salón del Círculo Ecuestre de Barcelona para ver y escuchar a Juan Ortega quien, con Joaquín Luna a los mandos, repasó aspectos de su vida personal y profesional dejando patente la vigencia de la belmontina sentencia «se torea como se es» . Pausado, reflexivo, Ortega, que esta temporada cumple once años de alternativa hizo memoria de su infancia y juventud y en ellas el germen de su pasión taurina. También, como hizo mención Luna, de la tarde triunfal en La Maestranza el 15 de abril pero sin olvidar la del 30 de agosto de 2020 en Linares, punto de inflexión en su carrera. Fue aquella la temporada bajo mínimos marcada por la pandemia, sin ferias, apenas alguna corrida suelta y al socaire de la ahora denostada televisión de pago. Seis de alternativa llevaba entonces Ortega y muy pocas corrida toreadas en ellas pero en Linares los aficionados (y las empresas) descubrieron un toreo y una forma de interpretar el toreo que han llevado al diestro trianero y senequista a un lugar de privilegio.
Creado en 1856, lugar de encuentro de la burguesía catalana, el Círculo Ecuestre organiza periódicamente actividades culturales de variados ámbitos, el toreo también en ellos.
El último torero que pasó por sus salones fue Francisco Rivera Ordóñez en 2005 y ahora Juan Ortega, que lamentó y casi pidió perdón por no haber estado nunca en Barcelona, una ciudad en la que aún late el corazón de la tauromaquia. Hoy, en el Hotel Oriente y con el mismo protagonista, nueva ocasión para comprobarlo.
Y allí mismo, el lunes 17, el cineasta Albert Serra.
Avisados quedan.