Los hermanos De la Puerta comentan sus ilusiones e inquietudes ante el importante compromiso de lidiar en Sevilla este domingo y nos ofrecen algunas claves de su ganadería. Una familia dedicada en cuerpo y alma al toro bravo que siente la responsabilidad de lidiar en su tierra.
HERMANOS DE LA PUERTA
¿Cómo es la novillada de Sevilla?
Julio de la Puerta: Para nuestro gusto es una novillada espectacularmente bonita, rematada, de buenas hechuras, baja y muy variada de sementales. Vamos con toda la ilusión del mundo.
¿Cuánto pesa la responsabilidad de Sevilla a un ganadero?
Pablo de la Puerta: Mucho, ten en cuenta que jugamos en casa. Nosotros vivimos en Sevilla, Sevilla es una plaza de gran relevancia. El marco de esa plaza y rodeado de toda tu gente… Figúrate el compromiso que eso supone.
¿Qué se va a encontrar el aficionado el domingo en el comportamiento de vuestros novillos?
Julio de la Puerta: Sobre el papel está escogida con mucho cariño, van novillos de varios sementales contrastados que han dado frutos muy buenos. Si no fallan los pronósticos debe embestir. El cartel es de tres chavales que están muy preparados y que andan muy bien, quiera dios que embista y metan la cara y que sirva para el triunfo de todo el mundo.
El año pasado fue un año importante para vuestra ganadería, ¿qué destacaríais de la trayectoria?
Pablo de la Puerta: Estamos satisfechos con el momento actual de la ganadería porque consideramos que estamos lidiando el toro que queremos lidiar, que es un toro brvo pero un toro para el torero, que sirva para hecrr bien el toreo. Y sí, la temporada fue una temporada importante para nosotros, difícil de repetirla aunque lo intentaremos. Tuvimos cuatro indultos, ocho toros de vuelta al ruedo y muchos toros importantes.
¿Algo que queráis transmitirle a la afición de Sevilla?
Julio de la Puerta: Más que un mensaje, deseamos tener suerte nosotros para que la tengan los toreros y el público disfruta. Buscamos y estamos consiguiendo un toro que dentro de la bravura embiste con clase. Esperemos que se vea en Sevilla.
Esta ganadería es una familia en la que se ve un relevo generacional.
Pablo de la Puerta: Para nosotros es un orgullo. Esto vino de nuestro padre y con muchísimo cariño lo cogemos y con mucho esfuerzo lo hemos continuado. Con esfuerzo y con una gran afición, que es la base de todo.