La ganadería extremeña de Victorino Martín es una de las que mejor cuida la información que transmite a sus aficionados, ya sea en la página web o en los distintos canales de información -tienen cuentas en Twitter, Facebook, Instagram, TikTok y YouTube-. Para cada festejo se suele grabar tanto a los toros días antes de viajar a la plaza de turno como el embarque de los mismos. También se le da la oportunidad al aficionado de conocer mediante fotografías los astados reseñados en primera instancia por los veedores.
Uno de esos vídeos que impactó en el aficionado fue el de los siete astados reseñados para la Corrida de la Prensa celebrada en Madrid el pasado 4 de junio, un encierro irreprochable de presentación para el mano a mano entre Emilio de Justo y Paco Ureña. Unas imágenes que se volvieron tendencia en redes por la espectacularidad de unos animales que se mostraban sin fundas horas antes de su embarque hacia la primera plaza del mundo.
Se trataba de Gallego n.º 36, Gallego n.º 61, Director n.º 6, Playero n.º 48, Esclavisto n.º 18, Boliviano n.º 43 y Colombiano n.º 4, siete toros del guarismo del 8 que fueron embarcados con destino Las Ventas en uno de los carteles más atractivos del ciclo donde el murciano Paco Ureña paseó una oreja de mucho peso, rozando la salida en hombros tras una tarde donde rayó a un nivel importantísimo.
«Madrid siempre ha sido muestra plaza, somos madrileños y aquí hemos aprendido a ser aficionados, a querer al toro«, explicaba a este medio Victorino Martín. «Por eso, venimos con toda la ilusión del mundo a que todo salga bien y preparamos una corrida con toda la responsabilidad que significa para nosotros lidiar aquí», añadía.
Una tarde que contó con la presencia de su Majestad el Rey Felipe junto al matador de toros Paco Ojeda en una tarde donde estaban anunciados en mano a mano De Justo y Ureña: «Es un orgullo lidiar en esta corrida, a la que se le quiere devolver la importancia que siempre tuvo con un cartel importante y que nos gusta mucho, son dos toreros que ya han triunfado con toros de casa y que conocen muy bien nuestra ganadería. Ahora sólo queda que Dios reparta suerte».
Una corrida que a la postre resultó realmente exigente con varios toros importantes del hierro de Victorino Martín. Exigente, pero obediente cuando se le llevó templado, el primero; duramente castigado en varas fue el segundo, que tuvo fijeza y también exigencia; con calidad y entregada franqueza por el derecho el tercero; de humillada calidad y máxima entrega, a menos, el buen cuarto; probón y mirón el peligroso quinto; bravo, encastado y con calidad el exigente sexto.