Hace cuestión de dos años, el empresario navarro Juan López comenzó una nueva andadura como ganadero de bravo con la creación de una nueva vacada Navarra bajo el nombre de López Vicente. Un proyecto que comenzó con la adquisición de un lote de vacas y un semental de Santafe Martón, hierro navarro con sangre Marqués de Domecq. López, oriundo de Larraga quiso ser torero, siendo alumno fundador de la escuela taurina de Tudela.
En la localidad navarra de Cintruénigo, concretamente en la finca Campocerrado, este navarro lucha por sacar adelante un proyecto ganadero con una base genética importante. En los seis cercados que tiene dicha explotación divide a los animales según sexo y edad. “La finca no es muy grande, pero para la cantidad de animales que tengo creo que es la ideal” comentó el ganadero en un reportaje emitido en el canal de YouTube de Detorero.
“Mi ganadería es corta, pero muy seleccionada” comentaba un ganadero que tiene en la cabeza el tipo de animal que quiere criar en su casa. “Para mí el caballo es fundamental, aquí en casa todos los animales pasan un mínimo 4 veces por el caballo. Luego en la muleta busco principalmente emoción, quiero un animal que se entregue por abajo tomándola con ritmo. El toro tiene que ser exigente, pero también agradecido cuando se le hacen las cosas bien”.
Juan sabe de las dificultades de ser ganadero, y más ahora cuando la inflación está disparada y muchas administraciones miran hacia otro lado. “Soy consciente del momento que vive la fiesta, pero por mí no va a quedar, voy a luchar por mantener a flote este proyecto. Una ganadería es una hucha sin fondo, aquí hay pocas ayudas, por eso un ganadero tiene que abrirse a nuevas vías de ingresos como las visitas a la propia vacada o tentaderos con aficionados prácticos. El pienso no se paga solo”.
Un ganadero que anda dando pasos cortos pero seguros. “No quiero volverme loco, esto es un proyecto para disfrutarlo, pero lo poco o mucho que haga con la ganadería será para hacerlo con el respeto que se merece la tauromaquia, y todos los valores que ella me ha inculcado”, declaró Juan López en una entrevista concedida hace un par de años a Noticias de Navarra. Un joven que sueña con poder lidiar novilladas sin caballos en Navarra, una tierra donde no proliferan en demasía las ganaderías de bravo.