Pablo Aguado fue uno de esos nombres que sorprendieron
gratamente a Sevilla el pasado verano en las novilladas sin caballos. Su día a
día en el trabajo le proporcionó un triunfo sonado y, sobre todo, un gran debut
como es en una de las Ferias de mayor ente de la temporada. Es en la Real
Maestranza donde habla con nosotros: templo sevillano y mundial del toreo.
«El trabajo ya está hecho, ahora lo que hay que hacer es trabajar la
mente», señala el propio Aguado.
Sobre
el escenario de su debut, Pablo asegura que «es la plaza donde hay que
dar el nivel obtenido. Me hace mucha ilusión. Es el sitio ideal para debutar.
Es una de las primeras plazas importantes de la temporada, con un cartel
también de suma importancia y con una ganadería con garantías. Llevo los
deberes hechos y aprendidos. Todo se junta porque son días bonitos».
Sabe
que todos los ojos del toreo estarán puestos, el domingo por la mañana, en su
debut con caballos. Lo sabe y, sobre todo, lo siente. «Ojalá
todos los días tenga que asumir responsabilidades así. Nos hacemos toreros para
estar en estas plazas de responsabilidad, con esta importancia y con ese
ambiente», declara el joven sevillano.
Dos
tardes está anunciado en el Baratillo: la del 12 de abril con un encierro de Luis Algarra, y el día del Corpus para
estoquear novillos de Villamarta.
Eso pesa en una mente temprana. «Estamos en el templo del toreo, me
siento y un auténtico lujo estar aquí. Me hace muchísima ilusión estar en la
primera tarde, con una novillada de Luis Algarra en el primero de ellos. Se ha
dado la casualidad de que la casa en la que me he hecho como torero esté
presente en mi presentación con picadores, después de tantos años sin venir
excepto los dos novillos de la encerrona de Lama. Es un cartel muy rematado, muy
sevillano, y la gente va a venir a verlo porque tiene mucha importancia en los
toreros. Me llena de ilusión matar esa ganadería tan cercana a mí».
También
el Corpus verá la gran proyección de Pablo
Aguado. Siente que será un día importante y así lo hace ver. «El
otro cartel es el de un día especial para Sevilla, donde la ciudad se viste
especial porque es el día del Corpus. Yo creo que también habrá mucho ambiente,
porque tiene mucho nivel, con los dos compañeros con los que actúo. y siempre
que ha venido a Sevilla se le han cortado las orejas. A pesar de todo, mi único
objetivo a día de hoy es Olivenza. El domingo cuando mate el segundo novillo de
Olivenza pensaré y soñaré con Sevilla».
El
cambio de eral a utrero no es nada fácil para un novillero: la experiencia
narra que muchos de ellos no han sabido acoplarse. No es así para Pablo Aguado,
pues tras un intenso invierno en el campo asegura que «todo cambia
mucho pro la presencia del caballo, por el volumen del toro, pro el comportamiento
del toro, pero ese cambio siempre lo tomamos a mejor, porque las embestidas son
más definidas y hay más posibilidad de torear despacio. Es verdad que hay que
aguantar el cambio de tamaño del toro, pero eso es lo de menos cuando el toro
embiste y cuando es buena la condición. Eso es lo último que piensa el
torero».
Sobre
sus objetivos más prontos después de su debut, la joven esperanza hispalense narra
lo que, de momento, tiene definido: «Todavía es muy temprano para planificar la
temporada a largo plazo. Tengo hechas cosas en varios pueblos de Francia, en
Bayona por haber ganado su certamen, en Calasparra tras haber ganado la Espiga
de Plata…esos son los objetivos. Pero lo mejor es ir novillada a
novillada».