CAMPO BRAVO

Javier Núñez, ganadero de La Palmosilla: «El pienso en 2001 estaba a 0,15 €/Kg y en 2022 a 0,55, pero el precio del toro es el mismo»


jueves 16 junio, 2022

Con la subida indiscriminada de precios, los ganaderos de toros bravos están sufriendo y viviendo una situación limite que les puede llevara a la ruina. Muchos de ellos se han visto abocados a la reducción de cabezas de ganado para adaptarse al momento que están viviendo.

Palmosilla
Un toro de La Palmosilla de la temporada 2020 que iba a ser destinado a Pamplona. © La Palmosilla

Hace unos días el ganadero Javier Núñez Álvarez volvía a lanzar un mensaje de SOS sobre la situación que vive el campo bravo hoy en día tras dos años de pandemia y las consecuencias de la guerra que hace un par de meses comenzó Rusia en suelo ucraniano. Sin duda el campo bravo y el mundo del toro se ha visto afectado por todas estas coyunturas que hace inviable para muchos hierros el seguir tirando hacia adelante.

Un llamamiento a la unión del sector ganadero por parte de Javier, que alzó la voz para que de una vez por todas la unión se lleve a cabo y se pongan las pilas para evitar una catástrofe que hoy más que nunca puede tornarse en realidad si no cambian drásticamente las cosas. A continuación exponemos íntegramente los mensajes publicados en Twitter por el ganadero afincado en tierras de Tarifa.

«En el año 2001 el pienso de los toros costaba 0,15 €/kg. En este año 2022 el precio es de 0,55 €/kg . Casi cuatro veces más caro… mientras que el precio de los toros sigue a niveles iguales o inferiores que en el año 2001. Los ganaderos llevamos mucho tiempo reclamando a los otros sectores que conforman la tauromaquia que nos sentemos de una vez para afrontar la cada vez más necesaria reconversión de nuestra industria. Para tener un espectáculo de futuro. Pasan los inviernos y no se hace nada. Nuestra fortaleza es la gran afición que hay a los Toros y el arraigo de la Fiesta. Nuestra debilidad la incapacidad para afrontar los retos como industria “Quo Vadis».

Con la subida indiscriminada de precios los ganaderos están sufriendo y viviendo una situación límite que les puede llevar a la ruina. Muchos de ellos se han visto abocados a la reducción de cabezas de ganado para adaptarse al momento que están viviendo. Pero el problema también radica en el que con esta subida de precios en las materias primas el toro ha depreciado su valor, algo inaudito que hace que los ganaderos pierdan aún más dinero.

Esta opinión que expresa Javier Núñez es compartida por muchos de sus compañeros, lo cual no hace sino reflejar una situación que ya llevan sufriendo desde hace bastante tiempo. Si a esto le sumamos los dos años de pandemia en la que muchos toros han ido al matadero a precios muy bajos, los ganaderos se ven con sus arcas muy mermadas de cara a seguir manteniendo unas ganaderías que sirven como protector de un ecosistema único.

Por el bien del sector, se debe poner una solución sobre la mesa a unos ganaderos que están haciendo un esfuerzo descomunal para seguir adelante con una herencia genética que durante años han mantenido en las familias ganaderas que año tras año siguen salvaguardando al toro bravo, ese que aman por encima de todo y que están dispuesto a proteger por encima de todo.