PAMPLONA

Los emolumentos de los ganadero en Pamplona: ¿Cuál es la horquilla en la que se mueven?


martes 4 julio, 2023

El toro es el eje de San Fermín, unos animales que son contratados por la Comisión Taurina de la Casa de Misericordia -conocida como MECA-, pero ¿cuáles son los honorarios de los ganaderos?

Miura Pamplona
Un toro de Miura sale de toriles en Pamplona. © Emilio Méndez

No son tiempos fáciles para ser ganadero de bravo debido a todos los problemas derivados de la pandemia y de la guerra en Ucrania. La primera de ellas trajo consigo una alarmante bajada de festejos, algo que por suerte se empezó a recuperar en un 2022 donde la curva cambió radicalmente. Un año que ha venido seguido de un 2023 donde los números superan -por estas fechas— a los de un 2019 donde la tendencia alcista de los mismos arrojaba datos positivos.

La subida de las materias primas derivada de la guerra en Ucrania está ahogando a los ganaderos, los cuales ven como rematar a un toro ha encarecido un 25% respecto a los años antes de la pandemia. Los ganaderos, pese a la normalidad vivida en 2022 respecto al número de festejos lidiados en 2020 y 2021, lanzan un SOS, alzan la voz contra una situación que en muchos casos se ha vuelto insostenible por los altos costes que tiene rematar un toro para una plaza de primera.

La reducción de camadas debido a la crisis ha provocado que el número de cuatreros y cinqueños sea menor al de 2019, por ello al existir carestía de toros, el precio de este sube, algo que ayuda a paliar esa subida de costes para el ganadero que antes hablábamos. En el tema de vacas es diferente: los ganaderos sabían que este problema tendría solución a medio plazo, de ahí que no fueran muchas las vacas que se llevaron al matadero.

Sí se redujo el número de hembras de toro, es decir, las destinadas a cubrición, dejando el resto vacías o con el manso. Esto se hacía para no perder las subvenciones que tienen muchos ganaderos por número de reproductoras. Con esto se bajaba el número de animales con destino plaza sin tener que eliminar reproductoras. Ganaderos como Juan Pedro Domecq han reducido su ganadería en un 60% en 10 años, algo realizado de forma paulatina y mesurada para no quitarse la genética realmente importante.

Al haber menos toros de plaza de primera, los cosos más importantes se han adelantado a sus principales competidores, bien peinando el campo desde hace meses u ofreciendo un precio mayor. Pamplona ha sido una de esas plazas, la propia Casa de Misericordia anunció en 2022 las mismas ganaderías que no habían podido comparecer en 2020 y 2021 por la pandemia, es más, este 2023 tampoco hubo cambios al respecto.

Si un toro antes de la pandemia podía rondar los 5.000 euros -nos citaba un ganadero de primera fila-, ahora poner a un animal rematado para una plaza como Madrid, Pamplona o Bilbao no baja de los 6500 €/7000 €. Por lo que, si nos ceñimos exclusivamente a seis toros para una plaza de máxima categoría, el coste de la corrida no debería bajar de los 50.000 €/55.000 € para que el ganadero tuviera cierto margen de beneficio sobre dicha corrida. Unos beneficios que ayudan a paliar el desastre de los años anteriores y cuadra de algún modo las cuentas que la pandemia dejó tiritando.

No todas las ganaderías cobran lo mismo en Pamplona

Palmosilla
Un toro de La Palmosilla para Pamplona. © L. P.

Pese al rumor que siempre ha pululado por los mentideros taurinos, no todas las ganaderías cobran lo mismo en Pamplona, algo lógico y normal. Y algo que tampoco ocurre con los toreros, simplemente coloca un listón -mayor que en otras plazas- del que no bajan a la hora de pagar una corrida de toros, es decir, unos mínimos, aunque éstos no existan para los ganaderos de bravo. Según fuentes consultadas por este medio, la horquilla va entre los 12 y los 20 millones de las antiguas pesetas, es decir, entre 72.000 y 120.000 € según el caché de cada ganadería.

Por lo tanto, en la horquilla baja cada animal rondaría los 12.000 € mientras que en la alta su precio llegaría a los 20.000 €, unas cifras importantes, más si cabe con lo que se paga en algunas plazas de similar categoría a los ganaderos. Vox pópuli fue cómo una ganadería de primera fila cobró por la corrida de la Beneficencia de Madrid hace algo más de un lustro una cantidad que sobrepasó ampliamente los 100.000 €, unos emolumentos similares a los que citamos anteriormente en la parte alta de la horquilla y que únicamente están reservados para las ganaderías top en momentos muy concretos.