Una pintura el quinto, tanto de pelaje, ensabanado mosqueado, como de tipología. Bajo, reunido. Guapo. Moral le dio la bienvenida en chiqueros de nuevo y galleó por chicuelinas para llevarlo al caballo, donde empujó humillado y fijo. Fue toro noble en la muleta, y aunque le faltó empuje para soportar un muletazo más (o dos) en cada serie, resultó manejable y colaborador. Moral alternó ambas manos en una faena bien estructurada y mejor descrita, más poderoso con la mano derecha, por donde llevó al toro muy sometido, incluso en una serie de rodillas a mitad de faena, y se gustó más por el lado zurdo, verticalizando y relajando más la figura. La oreja, después de una estocada entera, tuvo fundamento
PAMPLONA
Pepe Moral y su verdad por naturales al ‘Lioso’ quinto de Cebada
martes 8 julio, 2025
Moral alternó ambas manos en una faena bien estructurada y mejor descrita, más poderoso con la mano derecha, por donde llevó al toro muy sometido, incluso en una serie de rodillas a mitad de faena, y se gustó más por el lado zurdo, verticalizando y relajando más la figura.

Pepe Moral. Foto: Olmedo