La Plaza de Toros de Ciudad Real ultima los detalles para su reinauguración, tal y como ha asegurado el alcalde de Ciudad Real, Francisco Cañizares, en la visita que han realizado al coso en la mañana de este viernes, junto a la concejala de Festejos, Fátima de La Flor y el director gerente de la empresa Proimancha, encargada de los trabajos. El primer edil ha anunciado a los medios de comunicación que será este lunes, 6 de noviembre, la fecha en la que se recepcionará la obra de la plaza de toros ciudadrealeña.
“Nos queda ahora un trabajo muy importante de cara a la función de esta plaza de toros, que es acoger espectáculos taurinos”, indicaba Cañizares e informaba que “nos queda sacar un pliego de adjudicación a una empresa que saque adelante la feria taurina en la ciudad”.
“Que antes de la feria de agosto se pueda reinaugurar”
El alcalde ciudadrealeño afirmaba que tiene la idea de que antes de la feria de agosto, la feria de la Virgen del Prado, se pueda reinaugurar esta plaza de toros, tras la importante obra que se ha realizado en ella. “Aunque se ve bonita y renovada es más importante lo que hay por debajo, los cambios en los tendidos y las cubiertas que se han acometido”, destacaba.
“Es un edifico vivo en el que vamos a tener que seguir realizando actuaciones para que tenga la mayor utilidad posible. Eso vendrá en los próximos meses y años”, aclaraba Francisco Cañizares, incidiendo en que la idea es aprovechar un edificio histórico en Ciudad Real para que a parte se su objetivo principal, de dar toros, también tenga una vida cultural amplia en la ciudad, además de ser motor de dinamización del barrio de la plaza de toros.
Por su parte, la concejala de Festejos, Fátima de la Flor respondía a los periodistas que la plaza de toros está al 99.9% terminada. “Se ha hecho mucha reforma y ahora mismo todo, a excepción de dotación pequeña y detalles, la obra está acabada. El remate final es la pintura y los burladeros, y ya están listos”, decía de La Flor.
Ampliación de los vomitorios por razones de accesibilidad
“Hemos tenido bastantes problemas que solucionar, como el caso de la cubierta, que nos la encontramos en un estado peor de lo que se pensaba, dando lugar a actuaciones imprevistas”, aseveraba el gerente de Proimancha, Ramón Martín-Serrano, responsable de las obras de rehabilitación. “Desde la ampliación de los vomitorios por razones de accesibilidad, hasta la reparación del drenaje existente del anillo perimetral tenían su dificultad, por el tipo de obra, una rehabilitación de un edificio histórico”, apuntaba Martín-Serrano, insistiendo en que estamos ante una plaza de toros accesible.