Entre múltiples cuestiones que Ramón Valencia -empresario de Pagés- contestó este jueves en su visita al programa 7 Toros 7, dirigido por Víctor García-Rayo, se encontró la relación con la máxima figura del momento, Andrés Roca Rey, de quien fue su apoderado durante cinco años.
“Como yo tuve la suerte de llevarlo cinco años, sé los gustos y necesidades que tiene, y lo tengo relativamente fácil”, señalaba sobre la negociación con él de cara al abono sevillano. “Cuando llamo a su apoderado y se lo planteo, me dice que parezco su apoderado. Y es lógico”, añadía entre risas.
¿Cómo empezó Ramón Valencia a apoderar a Roca Rey?
Sobre cómo empezó Ramón Valencia a apoderar a Roca Rey, señala que “lo cogí a él en una novillada del Corpus viéndolo, en la que cortó una oreja. No lo había visto más que en Madrid un día. Me gustó tanto la actitud que estaba mostrando y que era algo distinto, que llamé a José Antonio Campuzano y le dije que podía ser que le durase poco a él, pero que si alguien le apretaba yo le ayudaba”, expone. “Y a los cuatro o cinco días me llamó y se presentó aquí con Andrés. Tiré lógicamente de las influencias que podía tener, defender la posición de un torero y pedir ganaderías y compañeros”.
“El primer año fue triunfando, al segundo en Pamplona estuvo estupendamente y de ahí para arriba”, añadía. Y sobre su ruptura, expuso que “yo tenía un contrato, que culminó. Hicimos un año más y está dentro de lo normal que los toreros quieran cambiar. Con su familia y con él me llevo magníficamente bien”, concluía.
En este sentido, hay que tener en cuenta que la Feria de San Miguel de 2023 ha dejado varias incógnitas en el aire, mientras la emoción lo embargaba todo con la despedida de uno de los toreros más importantes de la historia, El Juli. El otro puesto de los que parecen seguros en esa fecha es el que ocupa el torero que más tira de la taquilla en estos momentos, el peruano Andrés Roca Rey. Pero, después de una Puerta del Príncipe, numerosas lecciones de toreo y la soberana lección que dictó en San Miguel sobre el albero maestrante del arte de torear, Daniel Luque no puede faltar.