Entre los meses de octubre y diciembre muchos ganaderos de bravo aprovechan para llevar los sementales a sus respectivos lotes de vacas, una decisión crucial para la ganadería al depender el futuro de la misma de esta decisión. En la ganadería Victorino Martín esta operación se va haciendo de forma escalonada, es decir, los astados que van a estar más meses con las vacas son los primeros en estar con ellas.
En la ganadería brava existen tres tipos de sementales. Primero estarán los contrastados, toros que se llevan unos seis meses con las hembras, estos toros tendrán un volumen alto de vacas al ser ejemplares que marcan un gran porcentaje de sus caracteres en su descendencia. Luego están los que padrean por primera vez, a estos se les suele enlotar con un número no muy alto de vacas hasta que el ganadero compruebe si los resultados son satisfactorios. Por último está el semental de repaso, un toro que, o bien cubre las vacas que no han quedado preñadas dentro de un lote en concreto, o se les da la posibilidad de estar en un cercado con la totalidad de madres que están todavía vacías.
En este caso hablamos de dos sementales contrastados de la divisa cacereña de Victorino Martín, dos toros que tienen a su disposición un amplio número de vacas, en este caso se trata de Cobradiezmos y Portezolano. Las imágenes que sirve la propia ganadería tienen como protagonista al segundo de ellos, un semental de grandes hechuras y muy en tipo de la casa. Pese a la amplitud del cercado esta animal toma rápidamente las puertas gracias a una parada de bueyes que saben hacer muy bien su trabajo. La ayuda de los caballistas es fundamental para llevar a cabo esta labor.
El toro huele desde lejos al hato de vacas, de ahí que no ponga ningún problema a la hora de pasar de una cerca a otra. Una vez que llega junto a ellas lo primero que hará será buscar aquellas que están en celo para cortejarlas y más tarde montarlas. Raro es el toro que deje cubiertas a la totalidad de las hembras que tiene a su disposición, siendo el citado semental de repaso el encargado de rematar el trabajo.
Cuando Portezolano vuelva al cercado de los sementales, su ganadero deberá tener especial cuidado con su alimentación, haciendo que este reponga los kilos perdidos durante los meses pasados. Este cambio se dan en torno al mes de mayo-junio, momento en el que los toros deben tener un merecido descanso. Pese a estar más escuálidos y cansados siempre es difícil sacarlos del cercado que comparten con las hembras, de ahí que se antoje fundamental el trabajo de los mansos y los caballistas.