CAMPO BRAVO

Toda la camada de Raso de Portillo, aún sin lidiar: esto es ‘lo que se guarda’ la mítica ganadería


viernes 21 julio, 2023

Los ganaderos de la divisa vallisoletana de Raso de Portillo nos abren las puertas de esta emblemática vacada para conocer el destino de sus animales de cara a este 2023.

Raso de Portillo
Un astado de Raso de Portillo para esta temporada. © Pablo Ramos

A 14 kilómetros de Valladolid se encuentra la emblemática ganadería de Raso de Portillo, una explotación ganadera rodeada de pueblos y urbanizaciones pero con la particularidad de vivir en un paraje natural protegido por Europa gracias a la Red Natura. Una divisa que ha aguantado el paso del tiempo y las modas a base de afición y mucha constancia. Un hierro que lleva más de 140 años en las manos de la misma familia, esa que siempre tuvo claro el tipo de animal que buscaban.

El de Raso de Portillo es un hierro con una importante amalgama de sangres, pese a ello, tienen bien definido el toro que buscan de cara a un espectáculo total. Esa amplitud de sangres le da una gran riqueza y variedad genética al estar compuesta por tres ramas bien diferenciadas, en su mayoría Santa Coloma vía Dionisio, Parladé vía Gamero-Cívico y Conde​ de la Corte, algo que dota de una personalidad bien definida a unos astados que tanto en genotipo como en su fenotipo tienen una seña de identidad muy marcada.

Una ganadería a la que se acercó nuestro compañero Pablo Ramos para fotografiar tanto la entipada camada para este 2023 como las hembras y los machos que dan lustre a una ganadería que actualmente dirigen los hermanos Gamazo, quienes defienden a capa y espada el legado heredado por sus mayores. Para este año la camada no es excesivamente larga, sin ir más lejos la demanda de sus animales es alta, teniendo que diversificar los lugares donde mandar a sus animales.

Los utreros de Raso de Portillo se lidian prácticamente en su totalidad en plazas de toros -poco en las calles-; sin ir más lejos, para este año tienen cerradas las plazas de Villalpando y Villaseca de la Sagra, donde están anunciados en sendos desafíos ganaderos con tres utreros cada uno. Unos animales muy en tipo de la casa y en los que tienen puesta mucha fe sus ganaderos, de estas tardes depende que se cierre algún festejo más a final de temporada. También lidiará una novillada completa en la localidad navarra de Peralta.

Respecto a los toros, se optó por dar prioridad al festejo popular al estar la demanda más centrada en los utreros. Ya hay vendidos un buen número de toros para las calles, algo que alivia en cierto modo las arcas de una vacada que le ha venido como agua de mayo, la venta a este tipo de festejos que tanto están proliferando en nuestra piel de toro, sin duda un salvavidas para muchos ganaderos con encastes en peligro de extinción. Un año en el que ha sonado el teléfono de forma más o menos continuada, ahora le toca a los pupilos de la familia Gamazo el corresponder con las expectativas puestas en ellos.

FOTOGALERÍA: PABLO RAMOS