Paseó las dos orejas Roca Rey del jabonero que hizo segundo, un toro que se lo echó a los lomos tras un desplante al final de la serie por el derecho. El de Torrealta no se había desplazado con el capote, dejándose pegar en su posterior paso por el jaco. Lo citó desde larga distancia en un quite por la espalda, donde, amén del ajuste, todo lo hizo con sumo temple. Se le vio relajado, buscando torear al toro siempre con cadencia y ritmo. Vimos una versión más asentada del limeño, que buscaba siempre sentirse toreando despacio al animal. El de Torrealta tuvo ritmo y buen embroque, reduciendo su embestida cuando venía enganchado. Y así lo entendió Andrés, dejando muletazos de zapatillas asentadas y muñecas rotas. Pero cuando más asentado estaba, sobrevino el percance: el toro le levantó los pies del suelo en un desplante. Afortunadamente lo encunó, pero al caer, el toro debió pisarle, saliendo el espada visiblemente dolorido. Sin mirarse, volvió a la cara del toro para dejar dos series más, donde buscó siempre el toreo fundamental antes de acortar distancias. Se metió entre los pitones en un alarde de valor, se dejó llegar una enormidad, demostrando que, pese al percance, él buscaba sentirse por la vía de la despaciosidad y el muletazo largo, antes de pisar los terrenos del astado. Con la mirada perdida, salió de la cara del animal antes de poner rúbrica a lo labor con una estocada que le aseguró la salida en hombros.
HUELVA
Roca Rey: una faena de profundidad, muñecas rotas y raza tras la cogida al segundo de Torrealta
viernes 1 agosto, 2025
El de Torrealta tuvo ritmo y buen embroque, reduciendo su embestida cuando venía enganchado. Y así lo entendió Andrés, dejando muletazos de zapatillas asentadas y muñecas rotas.
Roca Rey pasea las orejas.