Con el clásico apretón de manos y por tiempo indefinido se selló, este viernes 23 de julio, el nuevo apoderamiento entre el novillero albaceteño Sergio Felipe y el taurino ciudadrealeño Ángel Ortiz.
Tras la tienta de un utrero de Carmen Arroyo en la finca “Las Cuadrillas”, propiedad del torero de plata Óscar Castellanos, se efectuó el acuerdo en el que apoderado y poderdante -que reapareció hace tres temporadas después de estar cinco campañas apartado de los ruedos- se plantean la recta final de su carrera como novillero con picadores.
Con cerca de una veintena de novilladas con los del castoreño a sus espaldas, Felipe quiere sumar ambiente y volver a Madrid, plaza en la que en 2013 cuajó al novillo «Iluminado» del hierro de Julio García y a punto estuvo de salir en hombros de no ser por el fallo con el acero. En 2019 también toreó una novillada en Las Ventas, pero el aciago lote de El Pilar que le tocó en suerte no le posibilitó el triunfo.