La primera corrida de la Feria de San Juan en la plaza de toros de León estuvo marcada por un momento de gran tensión cuando Capricho, uno de los caballos más emblemáticos del rejoneador conquense Sergio Galán, sufrió un percance durante la lidia del primer toro del festejo, perteneciente al hierro sevillano de Soto de la Fuente.
El incidente tuvo lugar en el tercio de banderillas, donde Capricho ejecutaba una de sus características batidas a pitón contrario, ajustadas al milímetro. En un momento de máxima entrega, el caballo fue alcanzado por el astado, provocando un desequilibrio que hizo temer lo peor en los tendidos. La plaza enmudeció por segundos que se hicieron eternos.
Afortunadamente, el desenlace fue menos grave de lo que inicialmente se temió. “Tanto el caballo como Sergio están bien. Fue un susto bastante grande pero gracias a Dios quedó en eso”, han señalado desde el equipo de prensa del torero a este medio de comunicación.
Capricho, hijo del legendario caballo Vidrié
Capricho, de raza lusitana y capa castaña, es hijo del legendario caballo Vidrié, con el que Sergio Galán firmó innumerables triunfos. Fruto de la cuidada selección ganadera de la Yeguada Sergio Galán, debutó en 2015 y desde entonces se ha convertido en uno de los imprescindibles de cada tarde. Su expresividad, su extraordinaria morfología y su entrega en la plaza lo han hecho merecedor del estatus de caballo estrella dentro de la cuadra del torero a caballo.
El percance, aunque impactante, no ha dejado secuelas físicas graves, y tanto jinete como caballo ya se recuperan con normalidad. Un susto que, por fortuna, quedó solo en eso.