El pasado mes de enero el periódico ABC de Sevilla sacaba a la luz una noticia relacionada con el futbolista sevillano Sergio Ramos y la vuelta a sus manos de la finca ‘El Rubio’, situada en Las Pajanosas, localidad perteneciente al término municipal de Guillena. Una dehesa de recreo de más de 40 hectáreas que estuvo arrendada hace varios años por el diestro Manuel Jesús ‘El Cid’, quien habitó en ella tras fallecimiento de Antonio Trujillo, propietario de ésta.
Tras la salida del diestro hispalense una vez terminado el contrato de arrendamiento fue adquirida por el futbolista de Camas a los herederos del citado Antonio Trujillo. Una vez adecentada y remozada el deportista hispalense encontró comprador, que no duraría mucho tiempo en la misma tras dinamitarse la transacción debido a un incumplimiento de los pagos acordados en el contrato de compraventa por la parte compradora, que sólo habría hecho frente a la fianza inicial.
Tras este paso atrás la finca volvería nuevamente a manos del sevillano, quien, según fuentes consultadas por este medio, no se cerraría a una posible venta siempre y cuando se igualara la oferta que en su día pusieron sobre la mesa los compradores colombianos. Sin una oferta en firme sobre la mesa, Ramos decidió asentar en los cercados de la finca a los potros y las yeguas de su ganadería equina.
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Mientras que las hembras no cambiaban de hábitat, encontrando en estos pagos de Las Pajanosas el lugar ideal para pasar el año, los potros, una vez llegado el momento de su doma, eran trasladados a la finca “La Alegría”, explotación que posee Sergio Ramos en el entorno de La Juliana (Bollullos de la Mitación), lugar donde se asienta la yeguada SR4. Un proyecto ambicioso que ya le está dando los primeros frutos al camero.
Pero la citada finca situada en las primeras estribaciones de la sierra norte cuenta también con una plaza de tientas donde espadas como Andrés Roca Rey o Alejandro Talavante han toreado machos a puerta cerrada gracias a las infraestructuras (corrales, manga, embarcadero…) que se levantan junto al ruedo. Se trata de una finca de recreo muy cercana a la capital hispalense, lindando esta con “El Roque”, dehesa donde la vacada de Soto de la Fuente tiene tanto los machos como los toros de saca. En el otro extremo de la carretera se encuentra el cortijo, la plaza de tientas y los cercados que dan cobijo a las hembras y las rastas de la ganadería.