Hace unos meses, Juan Diego Madueño, compañero del Diario El Mundo, publicaba una jugosa entrevista con el polémico Peter Janssen, activista antitaurino que desde hace tiempo se han convertido en un icono contra la Fiesta del los toros. El joven holandés tiene 37 años y es antitaurino de profesión. Desde hace una década salta a los ruedos de las plazas de toros como protesta, y pese a sus innumerables detenciones campa a sus anchas sin temor a ser detenido.
Janssen confesó estar a sueldo de CAS International, la organización holandesa que persigue prohibir los festejos taurinos, algo que le permite desplazarse de un sitio a otro para continuar con sus reivindicaciones. Como bien señala Madueño en su entrevista; Janssen es un idealista que maneja tópicos sobre la industria taurina. “Los toreros están subvencionados”, unas declaraciones ya muy manidas y que se caen por su propio peso.
Uno de los toreros con el que sufrió un encontronazo fue con el extremeño Alejandro Talavante, según se puede leer en otro de los fragmentos de la entrevista antes citada. El holandés no teme las multas, ya que estas se pagan con las donaciones que hace los propios socios de estas asociaciones. “He llegado a pagar hasta 1.000 euros”. Sus saltos son considerados infracciones administrativas por la Ley de Seguridad Ciudadana. Llevar al día las cuentas pendientes con la Administración le permite mantener este estilo de vida del que tanto presume.
“¿Sabes? Talavante me dio un golpe cuando pasé a su lado, acompañado de la policía. ¿Te parece normal?”, le comentaba en el final de la entrevista a Juan Diego Madueño, unas declaraciones que sacaban a la luz un nuevo encontronazo con un torero. No teme provocar a los taurinos, sabe que la ley está de su parte, que puede campar libremente mientras no cambie una ley que en otros países es mucho más severa: “En Japón pasé 20 días preso por saltar a un delfinario”, presume en dicha entrevista.
Tras el caso Talavante: Janssen y la sentencia que le obliga a pagar 100.000€ a Morante de la Puebla
Innumerables veces son las que ha saltado a los ruedos, quedando impune la mayoría de las veces. Un activista que ha tenido encontronazos, entre otros, con José Antonio Morante de la Puebla, torero al que le debe 100.000 € tras ser condenado por un juez. Un espada al que siguió varias tardes durante la temporada de 2015, provocando incluso altercados con su cuadrilla, esa a la que denunció el propio holandés por unas supuestas agresiones en la plaza de toros de Mallorca y que quedó en nada tras la absolución por parte del juez.
Aquel encontronazo quedó marcado por otra denuncia, según podemos leer en las páginas de El Mundo. Morante de la Puebla le reclamó 100.000 euros por injurias. “Le puedo llamar asesino. Así lo reconoció el juez. Si matas animales, eres asesino”. Moeckel, el abogado de Morante, desmiente esta versión. “En la conciliación se reafirmó. Fuimos a juicio y se declaró insolvente. Tiene una deuda de 100.000 euros”.
La manifestación antitaurina de PACMA hace unos días y el doble rasero a la hora de medir la afluencia
Un Peter Janssen que no sabemos si fue de los animalistas que el pasado fin de semana acudieron a la explanada de la plaza de toros de Las Ventas para protestar contra los festejos taurinos. Una concentración que no contó con una masiva participación por parte de las distintas asociaciones convocantes, algo que demuestra que son una minoría respecto a todos esos que pasan por taquilla en una plaza de toros.
Al día siguiente desde las redes sociales se hizo viral una imagen aérea donde se podía ver la plaza de toros de las Ventas mientras se celebraba el desafío ganadero entre Partido de Resina y Sobral, unas imágenes captadas por TVE donde se veía que el coso venteño no contaba con una buena entrada. Un festejo en el que se dieron cita más de 6.000 personas, un número superior al de la manifestación del día anterior a la que, según fuentes del PACMA, acudieron unas 5.000 personas
Un festejo que tuvo que combatir con el mal tiempo reinante en la capital de España durante ese domingo, una final de la Supercopa de España de Baloncesto, la etapa final de la Vuelta Ciclista a España o el partido que a las 9 de la noche arrancaba en el Santiago Bernabéu entre el Real Madrid y la Real Sociedad. Pese a todo ello, y pese a que no son números buenos para una corrida de toros en Madrid, queda claro el doble rasero que se tiene a la hora de medir la afluencia a un acto, declarando como un éxito la concentración y manifestación animalista, con un espectáculo en el que miles de personas pasan por taquilla.