Saltaron chispas el pasado miércoles en el coso de La Ribera cuando Roca Rey se fue al centro del ruedo para hacerle un quite a su compañero Alejandro Talavante, algo que no debería sorprender a nadie, puesto que la tauromaquia es competencia. A partir de ahí vino ese encontronazo entre ambos que llamó tanto la atención. El extremeño acudió hacia la zona del ruedo donde se encontraba Andrés para hacerle ver su descontento, algo que el peruano no pareció tomárselo a bien como bien vemos en la imagen que ilustra la noticia.
Mientras Talavante le recriminaba su acción Roca Rey le cogió de la cintura, algo que no pareció gustarle al extremeño. Fueron pocos segundos, pero los suficientes para ver que la tensión se podía cortar con un cuchillo. Tras esos segundos de alta tensión, Alejandro se fue a la cara del toro para ejecutar su turno de quites. Una tarde donde el claro triunfador sería un Diego Urdiales que cuajó de cabo a rabo al cuarto de la tarde en una de las faenas de la temporada.
Los dos quites de Talavante y Roca Rey en Logroño
Así contamos todo lo que paseó en el segundo capítulo del festejo de ayer en Logroño. Buen saludo capotero de Talavante al segundo, con faroles invertidos por alto, verónicas despaciosas, una tafallera y revolera para terminar. Quite de Roca Rey con el capote a la espalda, replicándole Talavante. Con estatuarios comenzó el extremeño, sin mover las zapatillas. Inntercaló molinetes y un cambio de mano con quietud. Toro sin recorrido, pero noble, al que exprimió y remató de estocada. Oreja con fuerte petición de segunda.
Este tipo de polémicas entre toreros se han visto siempre, de ahí que no deba sorprender a nadie que dos de los gallos del escalafón no tengan una relación más allá de la cordialidad. Precisamente esto es lo que busca el aficionado, piques entre ambos, competencia y rivalidad en el ruedo, algo que sin duda irá a favor de un espectáculo que muchas veces peca de falta de ambición por parte de unos espadas a los que no se le mueve ni un músculo de la cara cuando otro compañero decide entrar en el turno de quite.
Lo vivido el miércoles, fruto de un calentón, no debe venir acompañado de un veto hacia su compañero, tiene que servir para que en el próximo festejo donde coincidan, el afectado no se lo piense dos veces y busque ganarle la partida a su compañero, pero no de boquilla, sino poniéndose en el sitio y diciendo alto y claro “aquí estoy yo”, por desgracia, ya tuvimos suficiente con el ¿veto? Sobre Daniel Luque, un torero que no tiene la oportunidad de medirse con un Roca Rey que por h o por b no quiere verlo ni en pintura como bien ha quedado demostrado desde el pasado mes de agosto.
La próxima cita entre Alejandro Talavante y Andrés Roca Rey será el sábado 30 de septiembre en la Real Maestranza de Caballería, ahí sería un buen momento para que ambos resolvieran sus diferencias dentro del ruedo, como, por otra parte, se hizo toda la vida. Será junto a Sebastián Castella en una tarde donde el ganado de la divisa madrileña de Victoriano del Río debe poner la bravura necesaria para que dos máximas figuras del torero como Alejandro y Andrés puedan dar su mayor nivel dentro del ruedo.
