Todos conocemos el significado de la frase «nadar contra corriente», pero si la utilizamos en el mundo taurino, es compleja y negativa desde cualquier punto que se mire. Si además nos trasladamos a las Islas Baleares (donde en los años 80 se daban muchísimos festejos taurinos) sería llover sobre mojado.
Nadar contra corriente fue lo que se propuso Soledad Hidalgo cuando el pasado mes de diciembre fue elegida presidenta de la «Asociación Gastronómica y Taurina Oro y Plata», consciente de la dificultad, por la situación taurina que se vive en Mallorca en la actualidad, lo primero que se propuso junto a su junta directiva fue dotar a la asociación de un local social como sede donde se pudieran reunir los socios y aficionados taurinos y a partir de ahí, cada mes organizan una comida con una serie de invitados con la intención de mantener viva la llama taurina en las Islas.
A finales del pasado mes de marzo han organizado una comida con éxito de público en el hotel Armadams, en la que fueron homenajeados tres toreros mallorquines que llegaron a compartir cartel en el coso balear: Rafael de Palma, Campanilla y Juan Vallés. Los tres invitados expusieron sus vivencias taurinas y participaron en una grata y entretenida tertulia con todos los aficionados.
