El hierro salmantino de Montalvo es uno de los de mayor personalidad del campo charro. Esta casa ganadera, fundada en 1925 por Antonio Pérez-Tabernero y cedida años después a su esposa María Montalvo, pasta en las cercanías de la localidad de Matilla de los Caños del Río, allí Juan Ignacio Pérez Tabernero moldea día a día el tipo de toro que tiene en la cabeza, un animal de grandes hechuras y una bravura enclasada que haga disfrutar al torero, pero también al aficionado.
Es un hierro con sello propio, con actual procedencia Domecq vía Daniel Ruiz y Zalduendo desde 1994 pero en el que aún se sigue manteniendo un hato de vacas del mítico encaste Martínez. Pero el grueso de la vacada procede, en la actualidad, del primer encaste mencionado. Un ganadero que sabe aquello que tiene en sus manos, una ganadería con una simiente muy importante proveniente de una de los encastes más contrastados del campo bravo.
Esta es su camada para la temporada 2024, que ya ha iniciado en cosos como Valdemorillo o Valencia:
