El toro bravo es un animal jerárquico, una especie que pese a ser herbívoro lucha a muerte por acabar con su rival. Al contrario que el león, por poner un ejemplo gráfico, lucha por ostentar el cetro, por sentirse el más fuerte, pero no para alimentarse de su presa. En el campo bravo hay procedencias que dar un toro más altivo en el campo y otros que se caracterizan por su nobleza, pero siempre hay animales que se salen del guion.
Aquí en Peñajara tenemos un claro ejemplo de ello: un animal que no acepta que se le maneje como al resto de sus hermanos, pudiendo llegar a arrancarse y ponerse peligroso, de ahí que esté solo y apartado. El animal bravo es imprevisible en muchas ocasiones, pero aún más cuando está sin la compañía de sus hermanos, ahí es cuando hay que tener realmente cuidado. En esta ocasión no es un toro ‘pegao’ el que se encuentra en la otra parte de la cerca.
El animal de Peñajara no es el líder de la camada, tampoco el más débil, simplemente está más cómodo apartado de sus hermanos. En un momento dado sus hermanos pasan delante de él, pero este ni se inmuta, pasa olímpicamente de ellos, no quería saber absolutamente nada de ellos. Un animal al que tampoco le gustaba correr con sus hermanos, es más, cuando estos salían al corredero, él se iba a la parte más baja de la cerca para estar tranquilo y salir en solitario a correr delante de ellos.
Puede que a este toro le pegaron una paliza de utrero, de ahí que no quisiera tener ningún contacto con ellos, o puede que su carácter le lleve a querer estar siempre solo. Sin duda un comportamiento raro en un animal bravo, ya que estos siempre tienden a estar en grupo para protegerse unos con otros, sin duda son historias que de no estar en el campo nunca se llegarían a conocer.
Unos años después de este reportaje, la ganadería fue vendida por José Rufino a Antonio Rubio Sánchez, el cual sigue manteniendo la ganadería en pureza y manteniendo esa sangre que la hace tan especial. Quejigoso de Calera y Chozas, y Torvicioso de Peraleda de la Mata son los cuarteles generales de una ganadería que en este 2023 sueña con poder entrar en los desafíos ganaderos que se celebran en septiembre en la primera plaza del mundo.