Borja Jiménez salió a hombros por la puerta grande de Las Ventas el pasado domingo tras desorejar al sexto toro de la corrida de Victorino Martín, un ejemplar llamado Milhijas que fue clave para su triunfo en la feria madrileña. En el programa El Séptimo Toro de Radio Intereconomía, Jiménez compartió sus impresiones sobre esa tarde histórica y sus planes a futuro.
“Era una corrida que representaba una apuesta fuerte, pero tenía la cabeza tranquila. Vi muy buenas condiciones en el toro, sobre todo por el pitón izquierdo. Con los primeros capotazos ya sabía que podía triunfar. El toro humillaba y se desplazaba, y por eso decidí ponerme por la mano izquierda desde el principio para que la faena tuviera emoción desde el primer momento. La plaza se puso en pie y la faena fue creciendo”, explicó el torero.
Sobre las consecuencias del triunfo en Madrid y la apertura de nuevos carteles, Jiménez fue claro: “Sé lo difícil que es llegar arriba y el sufrimiento que supone que te llamen de plazas importantes y luego no puedas actuar. Creo que todos los toreros que han triunfado en plazas de primera merecen tener la oportunidad de elegir sus compromisos y ser recompensados. Aunque no sean los nombres más fuertes ahora mismo, tienen ese mérito y se lo han ganado. Con toreros como Víctor Hernández, que ya han tenido éxitos en Madrid y otras plazas, hay que apostar porque tienen proyección para ser figuras. Y lo digo desde la humildad, insisto en que hay que seguir trabajando, entrenando y dando motivos”.
En cuanto a la ganadería, Borja valoró la importancia del encaste Victorino Martín: “Es una ganadería muy difícil, sus toros complicados te hacen pasar momentos muy duros, pero cuando se resbala uno de esta casa, el triunfo vale por varios, sobre todo en Madrid. Esta ganadería va a estar ligada a mi carrera. También he salido a hombros con Victoriano del Río, y este año he cortado dos orejas a Jandilla en Sevilla. Me gustaría atesorar triunfos con una gran variedad de encastes”.
Un triunfo en Las Ventas que, sin duda, marca de nuevo un antes y un después en la trayectoria de Borja Jiménez, que sigue consolidándose como eje del toreo actual.