TEXTO: MARCO A. HIERRO / ILUSTRACIONES: JUAN IRANZO
Llegó el día del adiós a Las Ventas para Manuel Jesús El Cid. Uno de los toreros más queridos por esta plaza en las últimas décadas hace su último paseíllo en esta plaza en presencia de dos de los toreros llamados a tomar el relevo generacional de la figura que hoy se despide. Todo ante el último de los seis encierros que ha echado Fuente Ymbro este año al coso de la calle de Alcalá.
Una de las mejores manos izquierdas que se ha exhibido en esta plaza pone hoy fin a una trayectoria en la que ha salido dos veces por la Puerta Grande, a lo que habría que añadir otras en las que la espada le ha truncado lo que ya estaba hecho. Faenas como aquella al toro Guitarrero, de Hernández Pla, o aquel Portilloso de El Pilar al que pinchó seis veces y áun así se alzó con los premios a la mejor faena. Será su festejo número 34 en la temporada de despedida, en la que lleva 41 orejas, un rabo y 11 faenas de dos orejas. Está claro que ya pasó su momento álgido, pero también que ha reverdecido laureles en la campaña de su adiós, lo que lo hace muy atractivo para el espectador.
El extremeño Emilio de Justo encarna a la perfección los valores de relevo del torero que se va. Como El Cid, tardó en romper, pero su pureza y su sinceridad a la hora de manejar las telas terminaron otorgándole el premio que buscaba. Hoy, reconocido por todos, comienza a dar señales de madurez, de poso y de un tremendo fondo de torero que se hizo presente en su encerrona de Dax este año, con toros de Victorino Martín. Será su última tarde en Madrid esta campaña, en la que las cosas no han terminado de salir como él quería, pero la imagen ofrecida sí ha sido sólida y duradera. El año pasado por estas fechas celebraba su Puerta Grande en Madrid; este año, con la afición francamente a favor, la calle de Alcalá le espera.
También Ginés Marín, pese a su juventud, tiene elementos en común con El Cid para tomar el relevo que deja el de Salteras como consentido de esta plaza. También Ginés sabe lo que es abrir la Puerta Grande de Las Ventas, pero sabe, además, gestionar la frustración de pinchar la gloria. Así le ocurrió en la última ocasión en que pisó este ruedo, si bien la actuación no fue ni de lejos tan rotunda como las otras dos. Torero de tremendos fundamentos técnicos, Ginés es un sabio conocedor del toro por lo precoz de su aprendizaje, lo que lo coloca hoy como pieza fundamental para mirar al futuro. Y un atractivo importante para valorar el presente.
Será el último de los seis encierros que Fuente Ymbro eche este año al ruedo de Las Ventas. Han sido cinco orejas las que se han cortado a los toros herrados con esta marca, pero han bastado para sacar por la Puerta GRande de Las Ventas a dos toreros: Miguel Ángel Perera el 15 de mayo y Tomás Rufo el 27 de septiembre, en la novillada que abría esta Feria de Otoño. Es, por tanto, no sólo una de las vacadas que siempre tiene toros y novillos para Madrid, sino también una de las más regulares a la hora de echar animales de triunfo. Aunque seis encierros en una sola temporada sean tal vez excesivos, a la hora de mirar por la variedad…