DECLARACIONES

Varea: "Este sí me ha dejado expresarme como lo siento"


sábado 21 marzo, 2015

Los novilleros comentan las evoluciones exhibidas en la arena en los micrófonos de Canal Plus

Los novilleros comentan las evoluciones exhibidas en la arena en los micrófonos de Canal Plus

El novillero de Algemesí Jorge Exposito vio cómo se le iba el primer trofeo de la tarde con el descabello, y se lamentaba de ello en los micrófonos de Canal Plus.

«Tenía el novillo calidad por el pitón izquierdo, la lástima ha sido el descabello, porque no me explico que no haya caído con la estocada, pero bueno, tenemos otro», aseguraba Jorge. Al cuarto le dejaba el valenciano una faena muy personal, destinada a premiarse con una oreja hasta que llegaron los pinchazos. «Ha sido un novillo que me ha permitido emocionar a la gente, pero la espada me lo ha llevado todo. No había que perdonar con la espada y no hay excusas».

También Ginés Marín precisaba del verduguillo para atronar al segundo, con el que alcanzó cotas de mucha profundidad en la faena. «Me hacen mucha falta las orejas y no es el mejor sitio para te ninguneen», explicaba Ginés. «Creo que he estado muy firme con un novillo muy exigente que sí ha tenido bondad por la izquierda y me he podido sentir en seis o siete naturales». Al quinto le cortaba Ginés una oreja a base de ofrecer una gran dimensión y profundidad. «El novillo ha tenido una bondad tremenda y lo único que le ha faltado ha sido un poco de celo para que fuera más rotundo. La pena que no cortase la oreja del primero, porque creo que he dado una buena imagen en Valencia. Estoy feliz por lo que he hecho».

El regusto de Varea también caló en el tendido valenciano, aunque el fallo con el acero y el aviso enfriaran la petición de orejas. «El animal tenía toda la nobleza del mundo, pero se ha acabado muy pronto, macho», decía Varea a Germán Estela. «Él se abría mucho y tenía mucha calidad, con un punto más de fuerza era de lío. Algún muletazo he podido pegar, pero espero que en el otro pueda hacerlo más rotundo».

Al sexto, el último novillo de Fallas, le cortaba Varea las orejas en una faena de regusto y de pausa, de sentimiento y de inteligencia firme y asentada. «Este sí me ha permitido expresarme como lo siento», explicaba el torero al final. «Tenía muchas ganas de sentir estas cosas y este ha sido un gran novillo, con una calidad tremenda. Me siento muy feliz».