Volverá a Ciudad Real. Volverá a su plaza. Fernando Tendero se enfrenta el próximo viernes a una tarde decisiva en su temporada: hará el paseíllo en el coso manchego para abrir la Feria del Prado, con un encierro de Fraile de Valdefresno y con dos compañeros de la provincia. Casi con tres lustros de doctorado, se encuentra en un momento de madurez en su carrera en el que ya busca otras metas, y sobre todo la fundamental: la de confirmar su alternativa en Madrid, algo soñado para aquel que se viste de luces y para quien lleva toda una vida luchando por un sueño. Hablamos con él ante su cita en el coso ciudadrealeño.
PREGUNTA- Ciudad Real vuelve a ponerse en el camino de Fernando Tendero, ¿qué y cuánto significa esta tarde en tu temporada?
RESPUESTA- Lo significa todo. Ten en cuenta que uno se prepara para plazas así, y más en tu tierra. Hacer el paseíllo entre los tuyos, en una plaza de segunda, con un toro de primera como el que saldrá y en un cartel con toreros de la provincia es una oportunidad perfecta para reivindicarte como torero. Mi preparación es la misma toree dos o veinte corridas, por eso saldré a entregarme al máximo en la tarde del viernes. Sé que el toreo es justo y tarde o temprano tendré oportunidades mayores, por eso hay que aprovechar cada bala como si fuera la última.
Hablas de que el toreo es justo, ¿lo ha sido contigo hasta ahora?
Todo pasa por algo, y si el destino me tenía preparado este camino es por algo. Lo que te puedo decir es que la conciencia la tengo muy tranquila porque no he dejado de soñar y de prepararme ni un solo día en estos años. Y aunque tenga la espina clavada de no haber podido confirmar en Madrid todavía ni haber podido torear en citas como la Copa Chenel, aun viviendo en la Comunidad de Madrid desde hace cinco años, la vida te da otro tipo de oportunidades como la de Ciudad Real. Ahora mismo mi meta y mi objetivo es mostrar delante de los míos el viernes lo que llevo dentro como torero y que no he variado nada la línea que me marqué desde que tomé la alternativa.
La Feria homenajea a Reina Rincón, uno de los nombres más destacados del toreo en la historia de la provincia.
Así es, es un justo homenaje. Reina Rincón era la luz del toreo no sólo que imprimía él en un ruedo, sino la que le quedaba por imprimir. Porque era mucho más lo que se le atisbaba que podía hacer en la Fiesta que lo mucho que estaba haciendo cuando lo perdimos. Por eso fue importante su carrera, porque era un torero al que no se le veía el techo, y fue un palo muy grande para todos perderlo tan joven. Sin duda que esta Feria es un justo homenaje a su lucha y a la entrega que dejó cada tarde en el ruedo. También, personalmente, me hubiera gustado que se hubiera tenido un recuerdo al maestro Calatraveño, que también se merecía un homenaje en su tierra tras perderlo hace un tiempo.
Fraile de Valdefresno es una ganadería y una familia que ha dado muchas tardes de gloria especialmente en Madrid.
Es una ganadería también para estar preparado, porque aunque sus toros son fríos de inicio, se entregan si te entregas a ellos. Ojalá alguno meta la cara como los grandes toros de Atanasio-Lisardo que Madrid ha visto en las últimas décadas y pueda expresarme como lo siento.