LA PREVIA DE SAN ISIDRO

Dos regresos y un tapado


sábado 27 mayo, 2017

Joselito Adame vuelve a pisar Las Ventas tras un año sin hacerlo, Ginés Marín después de su puerta grande del miércoles y Francisco José Espada, el tapado, a destaparse con la de El Torero

Joselito Adame vuelve a pisar Las Ventas tras un año sin hacerlo, Ginés Marín después de su puerta grande del miércoles y Francisco José Espada, el tapado, a destaparse con la de El Torero

MARCO A. HIERRO / ILUSTRACIONES: JUAN IRANZO

Los aficionados que se dejan sorprender por las novedades y los que vienen a ver nombres contrastados, aunque no tengan en Madrid la rotundidad de otros, están de enhorabuena hoy. Lo están porque en un mismo cartel se conjuga el público mexicano que llega para ver a su ídolo patrio, el local que se quedó prendado el miércoles del toreo de Ginés Marín en su puerta grande y los que aún recuerdan el sabor de aquel novillero que enamoró a esta plaza con la mano izquierda.

JOSELITO ADAME

A estas alturas Joselito Adame ya es un auténtico figurón del toreo en México, un ídolo allá por donde pisa que, sin embargo, debe confirmar su condición y ganarse sus contratos en Europa paso a paso hasta el momento en que termine de romper en actuaciones clave en los momentos clave, y la de hoy, desde luego, pretende ser una de esas.

El mexicano no estuvo acartelado el pasado año en el serial más importante del mundo, y la empresa lo atribuyó a un malentendido, pero este año, con otra empresa y a doble actuación, Joselito necesita que la afición de Madrid no olvide sus comparecencias entregadas y sinceras en esta plaza, donde siempre parece transmutarse y ofrecer la mejor versión que lleva dentro en ese momento.

Torero poderoso y de tremendo conocimiento del oficio, también es capaz de romper las faenas con sutilezas de armonía, pero sobre todo con la exigencia por abajo de su mano derecha y el gran valor que atesora y que también le da su extraordinario dominio de la técnica.

 

FRANCISCO JOSÉ ESPADA

El de Fuenlabrada fue uno de los novilleros punteros en el escalafón inferior, en gran parte por sus actuaciones entonadísimas en Madrid. Cuando sacó a pasear la sutil fragilidad de su mano izquierda convenció a la parroquia de la calle de Alcalá a base de sinceridad.

Apoderado por César Jiménez, tiene mucho del concepto del también paisano, pero dista de él en el sello personal que le imprime, por ejemplo, a la forma de manejar el vuelo con la mano izquierda. Esta es su segunda tarde de la temporada, tras el paseíllo realizado en San Martín de Crau, donde la corrida no ayudó demasiado a sus intereses.

Esta es la oportunidad más importante de su carrera, porque es la más inmediata. Es, además, el tapado del cartel, porque teniéndolo cerrado desde hacía tiempo, nadie daba su nombre entre los elegidos para esta tarde. Por eso tiene que hablar en el ruedo. No le queda otra.

 

GINÉS MARÍN

El extremeño es el torero que todos quieren ver después de descerrajar la Puerta Grande de Las Ventas el pasado miércoles y de revalorizarse casi un 200 por cien en el valor de las entradas. Ginés está en racha y eso los toreros deben aprovecharlo, porque cuando llega la ráfaga favorable es cuando uno debe definir y apuntalar su carrera.

A Marín nadie lo conoce por arrugarse en las grandes citas, pero sí es cierto que coirre el riesgo de encontrarse con una plaza de Madrid distinta a la que dejó el miércoles, y eso puede pesar en la espalda de un torero que no ha dejado de ser muy joven, pese a su triunfo.

Las miradas estarán puestas en él, no cabe la menor duda. 

 

TOROS DE EL TORERO

La ganadería de Lola Domecq es una de las vacadas predilectas de los toreros que gustan de torear despacio. Y sin embargo, el fondo de Salvador, su padre, hace que las reses de este hierro gocen de un fondo de bravura que supone una fuente para el refresco del encaste Domecq

En la actual temporada únicamente ha lidiado cinco toros en dos festejos, con tres orejas cortadas y un toro importante. Tanto como lo fue el que lidió Sebastián Castella en esta misma plaza hace dos años, que saltó como sobrero y fue uno de los toros de los que más recordaba el aficionado al final del serial.

Materia prima, desde luego, tiene.