PABLO
LÓPEZ RIOBOO / FOTOGALERÍA IVÁN MATITO
Mambrú
se reafirmó esta tarde en Sevilla como uno de los grandes nombres de plata. Una
tarde en la que Juan José Padilla salió a hombros con tres orejas en su
esportón y por la del Príncipe se fue camino del hotel.
Destacó
la gran brega del subalterno andaluz frente al segundo de la tarde, un astado
al que le paseó una oreja Padilla y con el que anduvo templado el subalterno,
abriéndole los caminos, toreando de capote a cámara lenta y confirmándose como
torero capaz ante un mansurrón de Gallardo que nunca se dejó ganar la pelea.
Toreando
a caballo fue el tercio de varas del tercer toro de la tarde, y también destacó
la lidia al cuarto por parte de Oliver. Fue ésta muy a favor del toro. Destacó,
del mismo modo, un buen puyazo de Germán González al abreplaza, un toro al que
Finito dejó detalles sin lograr despuntar.