JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO
Por segundo día consecutivo, el equipo presidencial de la plaza de toros de Valencia mostró la incompetencia malintencionada para estar subido en un palco. Ya lo hizo el lunes de Fallas, no premiando la gran condición de dos novillos de Fernando Peña que bien merecieron los honores post mortem que el palco no otorgó; sin embargo, sí fue generoso en premios con un Jesús Chover que mostró voluntad y aunque no es ese el objeto de debate aquí, sí que lo es la falta de criterio de no premiar a todos los actores de este espectáculo como hizo la presidencia.
Ahora, con una petición de doble premio, su cicatera espera se esperó para no entregarle a Marcos la segunda oreja. Un novillero, no olvidemos, que vuelve a puntuar -un año después de también hacerlo en el mismo coso- en la primera Feria de primera categoría de la temporada.
“Noruego”, colorado de capa, marcado con el número 43 y con un peso de 518 kilos era el tercero de la tarde, primero del lote de Marcos. Con una larga cambiada en el tercio recibió el joven al animal, al que le sopló media docena de verónicas de bella factura y calado en el tendido. Alberto Sandoval se encargó del tercio de varas del astado, que echó la cara arriba en el primer encuentro con el peto. Por chicuelinas fue el quite de Pérez antes de entrar al novillo por segunda vez al caballo de Sandoval. De berenjena y plata clavó con brillantez el primer par de banderillas Miguel Martín, perdiendo las manos el de El Freixo en la entrada de Domingo Valencia en el segundo par, debiendo repetirlo ante lo deslucido del primer intento. Lidió al novillo de forma magistral Sergio Aguilar. Bien le corrió la mano Marcos a un animal que se fue viniendo a menos conforme avanzaba la lidia muleteril del novillero. En corto y en terrenos del tercio lo intentó Pérez, que encontró en ese espacio su hábitat para pegarse un arrimón ante el aplomo de su oponente. Por circulares lo intentó en el epílogo muleteril.
A la puerta de chiqueros se fue Marcos a recibir al último de la tarde, novillo al que luego capoteó con conexión arriba. Francisco Javier Sánchez se encargó del tercio de varas del animal. Sergio Aguilar entró por delante dejando un gran par, calando en el respetable; espectacular fue también el tercero, con el público en pie y debiendo salir a recoger la ovación por ello. Por la mano derecha comenzó a correrle la mano para llegar arriba. Tercio de Quites sonó desde la banda, siguiendo su labor por la mano diestra ante un novillo que le repetía por abajo para crujirse de toreo y conectar perfectamente arriba. Tras la estocada hasta la bola, se pidieron las dos orejas y solamente sacó un pañuelo al final la presidencia.
Bonito de hechuras era el primero de la tarde, un astado con el que no lució de capa Toñete. Carlos Pérez se encargó del tercio de varas del animal, que salió al relance en el primer encuentro y empujó con la cara a media altura. Bien lo cogió y bien midió el castigo el varilarguero en ese primer puyazo. Por chicuelinas fue el quite de Jorge Rico, conectando pronto con el respetable valenciano; respondió por gaoneras Toñete. Agustín Serrano fue el encargado de la lidia del animal, pareando Ángel Gómez Escorial por delante con solvencia y siguiéndole en suerte Javier Gómez Pascual. En el último par del tercio, en la misma cara clavó Gómez Escorial, asomándose el balcón en un momento en el que el novillo le echó la cara alta. Buena fue la primera tanda de Toñete por la mano derecha, pero el viento comenzó a molestar al novillero madrileño, por lo que tuvo que acudir a terrenos del tercio para proseguir su labor. Pinchó al animal y fue ovacionado. Juan Carlos Sánchez fue el encargado del tercio de varas del cuarto novillo de El Freixo tras el saludo capoteril de Toñete. Lo intentó Agustín Serrano en el primer par, solamente pudiendo colocar un rehilete ante la lidia de Gómez Escorial. Gómez Pascual anduvo efectivo en su turno. Se diluyó el trasteo que, además, estuvo mal rematado con la espada y a punto estuvo el joven de ver cómo le devolvían a corrales al animal. Silencio tras dos avisos.
“Nítido”, de El Freixo, se llamaba el segundo novillo de la tarde, un negro mulato herrado con el número 58, de 500 kilos de peso y al que dejó verónicas a pies juntos de salida Jorge Rico de bella factura y calado en el tendido. Diego Cotán se encargó del tercio de varas de un novillo que apuntaba buenas maneras al menos en ese momento. Efectividad mostró en el primer par Carlos Chicote ante un animal que salía suelto de la suerte. Antonio Olivencia dejó con facilidad el segundo par, en muy buen sitio ante la lidia de Oliver. El inicio de faena estuvo lleno de belleza especialmente por la mano baja y la despaciosidad de los muletazos del joven. Administró las tandas el alicantino para sobreponerse a la condición mansa del animal de El Juli, gustando al público. Entró a matar recibiendo, algo que gustó arriba, pero la tardanza en caer del novillo enfrió que los pañuelos saliesen. Ovación. Carlos Chicote fue el encargado del tercio de varas del novillo. Difícil y para pasar todo un trago fue el tercio de banderillas del animal, al que Daniel Oliver dejó el primer palo y Antonio Olivencia clavó como pudo. También lo que pudo hizo el novillero frente a un animal que no se dejó con facilidad.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Valencia. Cuarta de la Feria de Fallas. Novillada con picadores. Un cuarto de entrada.
Novillos de El Freixo.
Toñete, ovación y silencio tras dos avisos.
Jorge Rico, ovación y silencio.
Marcos, silencio y oreja.