TEXTO: MARCO A. HIERRO / ILUSTRACIONES: JUAN IRANZO
Retoño joven es el que hace el paseíllo este martes en la plaza de toros de Las Ventas. Debuta la ganadería de Torrehandilla-Torreherberos en este ruedo, un hierro que pasta en la finca de Los Recitales y está en manos de los hermanos Morales. Además, Luque encabeza una terna en la que Galván y Lorenzo, tras la Puerta Grande con tres orejas en Resurrección, tienen mucho que decir. La calle de Alcalá los espera.
Segunda cita que tiene Luque en este San Isidro 2018. Fue hace varias temporadas cuando su nombre comenzó a desaparecer de los carteles de las ferias y cuyo cartel se escuchó cada vez menos entre los que suenan para torear. Muy pregonado fue -por varios de sus antiguos mentores- su indiscutible marchamo de figura, pero fueron pasando los toros y ni siquiera los que le valían para triunfar le hicieron coger el poso de figura.
Una oreja avaló el año pasado el 12 de octubre su paso de dos tardes en todo el año por esta plaza y le dio moral para afrontar el invierno en América, donde ha hecho el paseíllo fundamentalmente en cosos mexicanos.
Ahora, con Roberto Piles como hombre de despachos y sabiendo que es una persona muy cercana a la empresa de Madrid –tanto que trabaja para ella-, Luque tiene sobre sí la responsabilidad de puntuar para que no le pongan excusas en el caso de que no lo pongan en alguna de sus ferias. La última tarde en este ruedo acaeció el pasado 11 de mayo, donde no tuvo opción de triunfo.
El gaditano David Galván, en silencio y sin hacer mucho ruido, protagonizó en 2016 una de las temporadas con mayor fuerza del grupo de los jóvenes. A pesar de, injustamente, no estar incluido en él por muchos empresarios, toreó la veintena de festejos en la que una oreja en el mes de marzo en Madrid eclipsada por la Puerta Grande de Curro Díaz le valió para ganar credibilidad.
Algeciras le terminó de embalar al estío taurómaco y así, entre fotos a hombros, finiquitó el gaditano su campaña. Ya el año pasado su única tarde en el abono acabó con sangre… la que le confirió un toro de La Quinta para no volver a pisar este ruedo hasta ahora.
Le definen sus ganas de mejorar y una acusada personalidad en su formas de torear en una carrera en la que ha sufrido también la gravedad de los percances. Mostró frescura, raza y una actitud personal con un concepto muy definido en sus inicios, pero ya va cogiendo años de alternativa y debe demostrárselo a Madrid.
Ha tenido oportunidades en Madrid y, en algunas ocasiones, ha visto cómo le mojaban la oreja en la capital: la última, a pesar de cortar una oreja, en la Puerta Grande de Curro Díaz; la anterior, en la salida a hombros de López Simón con la corrida de Las Ramblas en San Isidro de 2015. Hoy se la juega con el debut de Torrehandilla.
Cortó tres orejas en la pasada corrida del Domingo de Resurrección en Madrid y se erigió como nombre fundamental en este inicio de temporada. Un auténtico zambombazo en la primera plaza del orbe para hacerse caro en una jornada tan crucial para el toreo como es la del Domingo de Pascua.
El toledano fue uno de los príncipes del escalafón menor, donde la Casa Lozano lo llevó con mucho mimo y fue este invierno cuando se echó en manos de Nemesio Matías, que ha encontrado en él un diamante que brilló en aquella tarde venteña.
Antes de este pelotazo, Lorenzo había contado sus apariciones por tardes importantes desde que tomase la alternativa, que tuvo lugar en Nimes; en Valencia esta temporada no sólo paseó una oreja, también dejó su nombre sonando para la campaña, y suele asumir con mucha serenidad los retos que se le proponen.
Es Álvaro uno de los más elegantes intérpretes de la verónica que existen en la actualidad, y uno de los que más despacio ejecuta el toreo que siente. Torero de planta firme, muñeca flexible y seriedad manchega en los ademanes. Estela de embarque preciso, toque suave y bamboleo hipnótico, tiene el don del temple para imponerse y una falsa impresión de fragilidad que pone a los públicos de su parte, lo cual es una baza importante.
La ganadería de Torrehandilla debuta en Las Ventas este martes, 29 de mayo. Se trata de un cartel compuesto por Daniel Luque, David Galván y Álvaro Lorenzo en una de las ternas jóvenes más esperadas de toda la feria de San Isidro.
El propio ganadero Alberto Morales ha comentado a CULTORO que “estoy muy ilusionado con el debut de mi ganadería en Las Ventas en pleno San Isidro, es el premio a la buena regularidad que estamos manteniendo estos años. Un altísimo compromiso por la responsabilidad que conlleva, pero a la vez, muy optimistas por las buenas hechuras de la corrida que tenemos apartada”.
Las reses de Torreherberos–Torrehandilla, pastan en la dehesa Los Recitales, entre las poblaciones de la sierra sevillana de Constantina y La Puebla de los Infantes.