TEXTO Y FOTOS: EMILIO MÉNDEZ
Una novillada de José Cruz hacía acto de presencia esta
tarde en la segunda de las corridas Generales de Bilbao, en la que Alejandro
Marcos, Pablo Aguado y Luis David Adame hacían el paseíllo. El ganadero de la
tierra volvía al coso que lo vio hacerse torero.
Con mucha soltura lanceó Alejandro Marcos al primero de José Cruz, enganchando con seguridad y rematando con una media tan sobria como sólida. Asentado el quite por tafalleras, e inteligente, sin molestar en los embroques y abrochando con una larga sensacional. Mucho más metido y suelto que en sus actuaciones más recientes, le cogió pronto el pulso al animal el charro, que se asentó, tiró de temple y no le dudó ni una sola vez al exigente animal. Sobrio, castellano, recio en los ademanes, pero todo lo profundo que podía ser con un novillo de buena calidad y el fuelle a menos. Supo componer con estética, poner valor en la mesa sin alardes y conectar con un tendido que necesitó más lleno el de La Fuente para sentir más calor. Macizo voló el toreo a dos manos en el final, pero la estocada caída dio al traste con cualquier premio.
Con mucha suavidad y hasta mimo se condujo Pablo Aguado con el castaño segundo, que tuvo voluntad de embestir y humilló en el quite por chicuelinas del sevillano. Al pico de la paleta se fue el segundo puyazo, lo que hizo sangrar mucho al de José Cruz. Mucho más ceñido que limpio fue el quite de Luis David Adame, que dio con los huesos del castaño en el suelo. Pero no le aguantó el animal en la muleta a las formas compuestas y pulcras del buen torero sevillano. Tuvo suavidad el trasteo, tuvo limpieza y tuvo calidad, dada la calidad que el feble animal mostraba en la embestida, pero faltó la conexión por lo aplomado del utrero. No anduvo acertado con la espada Aguado y el silencio fue la valoración de una labor mucho más valiosa.
El tercero, de muy mermada condición física, se fue para atrás al perder las manos repetidamente tras el tercio de varas. Con el sobrero, del mismo hierro, lució Luis David a la verónica en una faena de gran nivel. Bueno el novillo, cumplió en el peto y tuvo transmisión y calidad. Con la muleta tuvo variedad y supo encauzar una labor siempre asentada sobre las plantas. Tres péndulos y un remate de desdén sirvieron para prologar la profun didad y la personalidad de los muletazos sobre la diestra y en redondo. Culminó con bernadinas muy ajustadas, pero falló con la espada, acertando al tercer intento. Ovación. y pasó a la enfermería por un corte en la mano.
Volvió a presentar Alejandro Marcos con el informal cuarto las mismas armas que en el primero; firmeza, conocimiento, aporte de soluciones y mucha firmeza de plantas e intenciones. Supo buscarle las vueltas al animal y darle todas las ventajas para tratar de que rompiese el de José Cruz, pero el fondo de nobleza y calidad no dio para más emoción. Ovación.
A la puerta de chiqueros se fue Aguado a recibir al quinto, que no lo vio y por faroles se fue detrás al tercio. Empujó el toro en un gran puyazo, y al ganadero fue el brindis de Pablo. Hubo muletazos de mucha torería y hasta de mucha estética, pero sin lograr la conexión total con el tendido. Hasta le echó mano el animal por la disposición mostrada, pero no fue suficiente para tocar pelo. Ovación.
De nuevo en el sexto se vio a un Luis David Adame arrollador, en una faena de alto vuelo con un toro rajado, mansón y nada fácil. Qutó por ajustadas zapopinas, poniendo el calor en el tendido. Ya con la muleta se le vio muy firme y con mucha claridad, con la inteligencia como base para encontrar la distancia precisa para lograr muletazos de mucho mérito. Con la espada se emborronó la labor de un mexicano que pudo haber cortado una oreja de cada toro y deja muy buenas sensaciones en Bilbao. Palmas tras aviso.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Vista Alegre. Segunda de las Corridas
Generales. Novillada con picadores. Un tercio de plaza.
Seis novillos de José
Cruz. De buena condición y calidad y fuelle justo el primero; de buena calidad y nula condición física el castaño segundo; devuelto el tercero por inválido;
Alejandro Marcos (verde manzana y oro): ovación y ovación.
Pablo Aguado (corinto y oro): silencio y ovación.
Luis David Adame (grana y oro): ovación y palmas tras aviso.