POR: IGNACIO RUBIO
Filiberto y Álvaro Lorenzo hacían el
paseíllo en la primera de la Feria de Tarazona de la Mancha. Un paseíllo lleno
de competencia es el que vivía la localidad albaceteña ante un encierro de José
Manuel Sánchez. Un gran ambiente se vivía en los aledaños de la plaza tras el pregón de Juani Serrano en la previa a esta Feria.
Filiberto
despachó un noble ejemplar de Castillejo de Huebra noble y con mucha calidad, toreando
primoroso a la verónica y quitando por tafalleras. Su comienzo con la derecha
lleno de temple y mando fue la clave para hilar dos series muy ligadas y
ceñidas. Exprimió al natural al novillo, pero lo estropeó a espadas con cuatro
pinchazos y descabello para recoger ovación con saludos. En el
tercero emborronó con la espada y descabello un faena completa donde los
mejores pasajes fueron al natural y los finales
por invertidos muy ligados. Fue aplaudido.Dos orejas paseó en el sexto Filiberto y otra ovación para el de Huebra tras una faena de rabia que comenzó con las largas en el tercio y unas verónicas templadas. Quitó por gaoneras para cuajar una faena de mucha exposición, cuajando series largas y buen trazo al natural. Tras el estoconazo hasta la bola, las dos orejas fueron justo premio a la garra y la entrega.
Lorenzo
cuajó una gran faena muy completa de
principio a fin al segundo, donde sólo faltó el volapié que encontró al segundo
intento. Fue ante otro bravo y noble de Castillejo al que el albaceteño toreó
primorosamente con el capote a la verónica, ganando pasos y rematando con media
de gusto. Quitó por chicuelinas tras una buena vara. El animal era noble y
repetidor ante un toreo poderoso de mano muy baja. Se sucedieron las series in
crescendo el temple y la ligazón. Al natural hubo pasajes de una belleza y
suavidad exquisita, encontrando los terrenos y clavando las zapatillas. Tras la
estocada, paseó dos orejas y larga ovación al novillo.
Álvaro Lorenzo
nos hizo rememorar en el quinto tiempos de toreo clásico, ligazón, sitio, valor y una
improvisación inusuales en tan joven
promesa. Con la espada llevó al traste una faena para el recuerdo. Se pidió
el indulto para el excelente novillo de Huebras, noble y repetidor comiéndose
el albero tarazonero, premiado con la vuelta al ruedo. Fue su final por luquesinas dignas del mismo mentor, pues tal fue la calidad del novillo que le
obligaron a dar dos vueltas al ruedo así como el torero también fue obligado a
ello. Otra
oreja cortó del que cerró festejo en una
gran faena de nuevo donde el toreo al natural fue de muchos quilates. Tuvo mano
muy baja, trazo largo y los de pecho de pitón a rabo fueron soberbios. Tan sólo
la espada media y baja le privó de un triunfo mayor.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Tarazona de la Mancha,
Albacete. Primera de Feria. Novillada picada.
Seis novillos de Castillejo de Huebra, el quinto premiado con la vuelta al ruedo.
Filiberto, ovación, palmas y dos orejas.
Álvaro Lorenzo, dos orejas, vuelta y oreja.