Casi lleno registró el Cortijo “Los Fernández” para el festival taurino de lujo con el que celebró su XXV aniversario y, con agradable clima, resultó triunfador el español Antonio Ferrera al cortar dos orejas. También “tocaron pelo” José Antonio Ramírez “El Capitán” y Rubén Núñez, en tanto, Leo Valadez y Héctor Gutiérrez fueron aplaudidos.
Se lidiaron astados de varias ganaderías, siendo bueno el segundo de Chinampas, con arrastre lento; toreables los de San Isidro, el primero y, de San Constantino, el tercero; complicados, el otro de San Isidro, el cuarto y, el quinto, de San Pablo. Y el de regalo, de Eduardo Santacruz, fue manso.
En el astado que abrió plaza, llamado “Poeta”, de la dehesa aquicalidense de San Isidro, que se dejó torear, el diestro en retiro mexiqueño José Antonio Ramírez “El Capitán” capoteó con voluntad hasta sufrir un susto, se repuso y logró templados lances a la verónica. Con la muleta, poco a poco fue metiendo en el engaño al burel para cuajarle artísticas series derechistas, imprimiéndoles el sello “caleresista”, pero lo mejor lo hizo por naturales, siéndole jaleados con fuerza. Mató de estocada en buen sitio y se le concedió una oreja.
El matador ibérico Antonio Ferrera, con “Místico”, de la divisa jalisciense de Chinampas, que tuvo calidad y bravura, veroniqueó con temple y lo llevó al caballo por chicuelinas caminándole al astado. Con la sarga, tras brindarle a “El Capitán”, realizó una faena bien estructurada que deleitó a la concurrencia, impregnada con detalles muy a su estilo y acabó de estocada bien colocada para obtener dos apéndices y a los restos del ejemplar chinampero dárseles arrastre lento.
El espada aguascalentense Leo Valadez, con “Mágico”, de la finca jalisciense de San Constantino, jugó bien los brazos en templados lances a la verónica y mejor se vio en un vistoso quite. Con la franela, inició su labor doblándose para hacerla con inteligencia y aprovechando la calidad del astado, pero que al final se vino algo a menos, sin embargo, lo supo entender para cuajarle pases lucidos por ambos lados del gusto del público. Cerró con detalles toreros para concluir de estocada caída para ser ovacionado.
Con “Chivo”, de la hacienda aquicalidense de San Isidro, algo incierto, el diestro también acalitense Héctor Gutiérrez capoteó de manera empeñosa y, con la pañosa, lo intentó a través de un firme afán por querer agradar. Lo fue sometiendo para cuajarle algunos muletazos de mérito, pero el burel acabó defendiéndose. Dejó un pinchazo hondo y utilizó el descabello para finiquitar, siendo silenciada su labor.
Regaló Héctor un sexto ejemplar, “Don Benja”, de la ganadería jalisciense de Santacruz, que manseó, para veroniquearlo con soltura y mejor quitar por chicuelinas. Con la tela escarlata lo intentó de verdad por ambos lados, pero ante la mansedumbre de su antagonista, al ya no querer dar “pelea”, todo quedó en el intento. Falló al matar y se le aplaudió el esfuerzo.
El novillero jalisciense Rubén Núñez, con un ejemplar de la vacada jalisciense de San Pablo, “Generoso” de nombre, incierto de salida, al que le logró dar algunos buenos lances a la verónica y sobresalió su ajustado y dispuesto quite por saltilleras. Con la muleta, el trasteo no fue fácil pues el astado le protestaba, sin embargo, el chaval se impuso con firmeza hasta lograr pases de importancia. Terminó de estocada y descabello para hacerse de un apéndice.
FICHA DEL FESTEJO
Tonalá, Jalisco. Festival taurino por el XXV aniversario del coso. Cortijo “Los Fernández”. ENTRADA: Casi lleno en tarde de agradable clima.
Astados de varias divisas, siendo bueno el segundo de Chinampas, con arrastre lento; toreables los de San Isidro, el primero y, de San Constantino, el tercero; complicados, otro de San Isidro, el cuarto y, el quinto, de San Pablo. Y el de regalo, de Santacruz, fue manso.
José Antonio Ramírez “El Capitán”: Una oreja.
Antonio Ferrera: Dos orejas.
Leo Valadez: Ovación.
Héctor Gutiérrez: Silencio y palmas en el de regalo.
Rubén Núñez: Una oreja.
Al final, Ferrera fue paseado en hombros.