BURGOS

Cayetano, único trofeo de la de Montalvo


miércoles 28 junio, 2017

Fueron silenciados Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante en la cuarta de Feria, mientras que el menor de los Rivera paseó una oreja del tercero de la tarde

Fueron silenciados Miguel Ángel Perera y Alejandro Talavante en la cuarta de Feria, mientras que el menor de los Rivera paseó una oreja del tercero de la tarde

TEXTO Y FOTOS: EMILIO MÉNDEZ

Llegaban las primeras figuras de a pie este miércoles a la
Feria de Burgos y, frente a un encierro de Montalvo, Miguel Ángel Perera,
Alejandro Talavante y Cayetano hacían el paseíllo.

El primero de Montalvo fue un toro con cosas buenas de
inicio, recibiendo Perera al animal con verónicas. Cumplió el astado en el peto
y en el quite por chicuelinas del extremeño. Después de brindar al respetable
dejó una faena muy en su personalidad: muletazos profundos y muy largos, pero
no terminó de romper el trasteo por la falta de transmisión del astado. Buenos
muletazos sobre todo por la derecha consiguió Perera. Falló en el primer
intento con la espada, acertando a la segunda y escuchando palmas.

El
segundo de la tarde, al que saludó Talavante con buenas verónicas y rematando
con una media, cumplió con poca fuerza en el caballo. Cuando se lo llevaron a
uno de los burladeros, se dio una vuelta de campana y se lastimó, por lo que la
faena de muleta sólo fue de detalles. El toro fue de más a menos, fallando en
tres ocasiones con la espada el extremeño. Silencio.

El
tercero de la tarde fue un toro con calidad, al que Cayetano saludó desmayando
las muñecas a la verónica, dejando una buena media, de sentimiento. Brindó al
respetable después de que el toro empujase con fuerza en el caballo de Luciano
Briceño. Emoción tuvo el inicio de faena, de rodillas al hilo de tablas. Fue a
más su labor, con derechazos muy buenos, ligando y conectando con la plaza. Los
de pecho, en redondo, terminando siempre con elegancia, tuvieron calado. Mató
de una buena estocada, tardando en caer el animal, por lo que requirió de
descabello. Le dieron una oreja con fuerte petición de la segunda.

El
cuarto fue un toro con clase y calidad, al que Perera le dio algunos lances de
capote buenos. Brindó al público para iniciar su faena con péndulos en los
medios. Fue un trasteo muy a su estilo, con muletazos largos ante un animal al
que le faltó un punto de transmisión. Inteligentemente le cuajó muletazos de
mucha largueza por ambos lados. Desafortunadamente falló a espadas y quedó en
silencio su labor. Antes, el toro se propinó una fuerte voltereta que mermó su
lidia.

El
quinto fue un toro noblón, sin transmisión, al que Talavante lanceó a la
verónica de inicio. Después, muleta en mano, inició emocionando en tablas de
rodillas, pero el toro no le dio la emoción que quería. Talavante lo intentó,
tratando de hacer la faena que no llegó a romper. Al final falló con la espada
y todo quedó en silencio.

El
sexto fue un toro bueno, con cierta calidad, al que Cayetano recibió a la
verónica muy templado. Brindó a Fandi, Padilla y Ferrera en un detalle muy
torero. El toro, antes del brindis, sufrió otro percance lastimándose al
encajar los pitones en la arena. Cayetano hizo el esfuerzo con la media
embestida de animal. Al final, aunque pegó muletazos buenos, falló a espadas,
teniendo que recurrir al descabello para ser silenciado.

FICHA DEL FESTEJO

Plaza de toros de Burgos. Cuarta de la Feria de San Pedro.
Corrida de toros. Casi lleno. 

Seis toros de Montalvo.

Miguel Ángel Perera, palmas y silencio. 

Alejandro Talavante, silencio y silencio. 

Cayetano, oreja y silencio.