Con la tranquilidad de que el novillero zacatecano César Pacheco (gravemente herido ayer en la segunda novillada del ciclo) ha salvado la vida gracias a la rápida intervención del equipo médico capitaneado por el Doctor Ricardo Robles (que fue ovacionado al ocupar su burladero en el callejón), arrancó el tercer festejo de la Feria Taurina del Arroz de Calasparra 2024 acontecido este jueves, 5 de septiembre.
En los chiqueros aguardaban seis novillos salmantinos del hierro de «Clairac» y en el patio de cuadrillas la responsabilidad se reflejaba en las caras de los novilleros Joao D’Alva, Mario Arruza y Pedro Andrés.
Como es costumbre en Calasparra los tres intervinientes saludaron tras romperse el paseíllo a un público que se congregó en la mitad del aforo del coso metálico. Después, el Ayuntamiento de Calasparra y la empresa Chipé Producciones pidieron por megafonia que el equipo médico saliera al ruedo para tributarle una ovación por el buen trabajo que realizan y por salvarle la vida al novillero César Pacheco, al que también se le dio una ovación como aliento para su recuperación.
Saltó al ruedo el primer ejemplar de Clairac, de nombre Buenas Tardes. Joao D’Alva estuvo muy voluntarioso durante toda la faena, puso la emoción al tendido con tres pares de banderillas. Ya con la muleta el novillo embistió a media altura sin dejarse demasiado. El viento tampoco favoreció el trasteo, se atascó con la espada poniéndose difícil el novillo escuchando hasta dos avisos. Silencio.
Al segundo novillo se le pidió la devolución con muchísima fuerza tras un posible problema en los cuartos traseros. El paso por el caballo fue anecdótico. Y cuando todo parecía un imposible, Mario Arruza se armó de valor y realizó una faena de mucho mérito ante un novillo que no tuvo un pase, quedándose siempre corto y echando la cara arriba descomponiendo la embestida. Se vio algún pase suelto de mucha torería. Dejó un pinchazo y una estocada caída. Ovación.
El colorao que hizo las veces de tercero le tocó en suerte a Pedro Andrés. El novillero ya de salida se gustó a la verónica dejando buenos momentos. Muleta en mano basó la faena por el pitón derecho donde conectó con el tendido tras darle una primera serie de buenos derechazos. El novillo se dejó por ese pitón y Pedro le dio hasta tres nuevas tandas con mucho gusto y torería. Cuando le tenía la oreja cortada no acertó con los aceros y escuchó dos avisos.
A la puerta de toriles se fue Joao D’Alva para recibir al cuarto de la tarde. Tras la portagayola se puso a torear a la verónica intercalándolas con dos largas cambiadas desde el tercio lo que puso al público en pie. Con los garapullos se la jugó y dejó tres pares de mucha exposición, sobre todo el último pegado a tablas. Cuando todo estaba para una gran faena se enfrió con la muleta, comenzó con un pase cambiado por la espalda y una tanda de derechazos pero el novillo cerró la persiana y el público desconectó. Lo intentó por ambos pitones el portugués dejando de nuevo mucha disposición. Dejó una estocada y un descabello. Dos vuelta tras petición minoritaria.
Con el quinto de la tarde se paralizó el tiempo y el público quedó enmudecido por la cogida de la tarde de ayer ya que el novillero Mario Arruza sufrió dos feas volteretas dejándolo el novillo en el suelo y yéndose feamente a por él. El novillo ya lo demostró desde los primeros compases que por el pitón derecho se quedaba muy reservón. Con la muleta lo evidenció y le dio hasta dos sustos. Mario no se arrugó y le cogió de manera muy fea. Dejando enmudecidos los tendidos, pasando a la enfermería.
El sexto de la tarde no tuvo historia, el novillo se quedaba corto y lo evidenció ya con el capote. Pedro lo intentó pero el animal no tuvo un pase y si tuvo mucho peligro. Silencio.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Calasparra (Murcia). Jueves 5 de septiembre. Novillada con picadores. 3ª Feria del Arroz.
Novillos de «Clairac». 1° y 2°, mansos y deslucidos. 3°, justo de fuerza y noble. 4° parado y deslucido. 5° y 6°, complicados.
Joao D’Alva: Silencio, Vuelta al ruedo tras petición mayoritaria de oreja y bronca al palco por no concederla y Silencio en el que lidió por Mario Arruza.
Mario Arruza: Ovación y herido.
Pedro Andrés: Silencio y silencio.
Entrada: Media entrada.
Incidencias: En la lidia del 5° novillo fue prendido el novillero Mario Arruza cuando pasaba de muleta al animal de «Clairac». Pasó a la enfermería para ponerse en manos del equipo del Dr. Ricardo Robles que le detectó una herida inciso contusa en cara posterior del muslo derecho, amplia, de 2 trayectorias, de unos 15 y 7 centímetros, superficial y afectando a piel y tejido. Sin sangrado. De pronóstico menos grave, que le impidió continuar la lidia.