El diestro español
Alejandro Talavante se alzó como máximo triunfador de la corrida nocturna
celebrada en el coso Monumental «Santa María” al cortar dos orejas del buen
quinto astado de la dehesa titular de Julián Hamdan y por ello al final ser
paseado en hombros.
Sus alternantes, el
también ibérico Enrique Ponce le logró «tumbar” un apéndice al cuarto ejemplar
de la función y el aquicalidense Fermín Espinosa «Armillita IV”, a pesar de su
buena voluntad y entrega, se fue de vacío en los tres astados que lidió. Por
toriles salieron seis ejemplares de la dehesa queretana de Julián Hamdan,
siendo devuelto el segundo por falta de presencia y fue sustituido por un burel
de Barralva que tuvo movilidad pero no acabó de entregarse. Del encierro
sobresalieron el quinto que mereció el arrastre lento y el cuarto. Y un séptimo
de regalo, de Marrón, que se dejó torear.
El espada valenciano Enrique
Ponce en el toro que abrió plaza, aplaudido en su salida por su buena
presencia, lanceó bien a la verónica y quitó de forma ajustada por chicuelinas.
Con la muleta el astado se vino a menos por el castigo en varas, tuvo poca
fuerza y aun así el torero de Chiva le logró dar algunos muletazos de calidad
pero sin poder redondear la faena. Falló al matar y tuvo silencio. A su
segundo, de nombre «Lugar de Origen”, que tuvo calidad pero le faltó
trasmisión, que fue lo que si le puso Ponce en templadas verónicas y en una
faena muleteril que fe de menos a más, prodigándose en una obra de arte, plena
de maestría, poder y oficio conectando de verdad con el público. Realizó la
poncina y acabó hasta el segundo viaje de estocada para que le fuera otorgada
una oreja.
El primer astado que
le tocó en suerte al diestro extremeño Alejandro Talavante vio cómo fue regresado
a los corrales ante la protesta del público pues aunque tenía cara sí era
bajito, además de que perdía las manos. En su lugar salió un ejemplar de
Barralva al que capoteó con variedad y lucimiento. Con la sarga, a un toro que
tuvo calidad pero que no acabó por romper, empezó doblándose y le cuajó un
trasteo lucido por ambos lados destacado su labor al natural que le llegó
fuerte al tendido pero al final no coronó con la espada para únicamente ser
aplaudido.
En su segundo, llamado
«Bendita Tierra”, de gran calidad, clase y recorrido, Talavante realizó una
faena llena de creatividad y magia torera desde con el capote, dejándose ver
muy variado en verónicas, chicuelinas y un quite vistoso echándose el capote a
la espalda. Ya con la muleta comenzó al hilo de las tablas con dos arrucinas y
después vino la inspiración total de este diestro dejándose llevar por su muy
personal forma de interpretar el toreo por ambos lados. Enloqueció a la gente
con su creatividad en el ruedo. Terminó de estocada y descabello para obtener
las orejas y al buen ejemplar de Julián Hamdan se le premió con el arrastre
lento.
El matador
aguascalentense Fermín Espinosa «Armillita IV” en el primer ejemplar de su
lote, otro de buena presencia, poco pudo hacer con el capote. Con la franela
hizo un evidente esfuerzo a un toro que tenía medios muletazos, siempre yendo
con la cabeza arriba y sin trasmitir. Lo intentó el espada con mucha raza y
ganas de agradar pero sin poder redondear pero sí dejó ver determinación. Mató
al segundo viaje y se le aplaudió la intención.
A su segundo,
«Armillita IV” lo veroniqueó con buen gusto y se hizo aplaudir en un quite
echándose el capote a la espalda. Con la muleta salió a darlo todo, con mucha
actitud comenzando de hinojos cerrado en tablas pero el toro vino a menos, se
quedaba a medio viaje, lo intentó de verdad. Mató bien y fue aplaudido. En un
séptimo de regalo, de la divisa de Marrón, Fermín anduvo con mucha voluntad, muy entregado. Lanceó bien a
la verónica y su quehacer de muleta fue a base de temple y largueza, plena de
entrega y esmero. Le tocaron «Pelea de Gallos”. Mató hasta el segundo viaje y
escuchó palmas.
FICHA DEL FESTEJO
QUERÉTARO, Querétaro. Coso Monumental «Santa
María”. Entrada: Media en noche de agradable clima.
Por toriles salieron
seis toros de Julián Hamdan pero fue devuelto el segundo por falta de
presencia, siendo sustituido por uno de Barralva que tuvo calidad pero no
rompió. Del encierro titular sobresalió el quinto que mereció el arrastre lento
y el cuarto. Los demás cumplieron en general. Y un séptimo de regalo de Marrón
que se dejó torear.
Enrique Ponce: Silencio y una oreja.
Alejandro Talavante: Palmas y dos orejas.
Fermín Espinosa «Armillita IV”: Palmas, palmas y palmas en el de regalo.
Al final, Alejandro Talavante
fue paseado en hombros.
Foto: Emilio Méndez