EMILIO MÉNDEZ
Luque: el exilio de un artista. Cuando España no anuncia en sus Ferias a un torero único como Daniel Luque, Francia está gozando de las mieles de su madurez. Bayona por encima de todas, Dax, Mont de Marsan… y ahora Nimes. Fue una delicia lo del quinto, todo un portento de faena y de detalles. Una obra de arte que no se puede explicar con palabras. Como su temporada en Francia, la del exilio de su tierra y de los suyos. La de la reivindicación de un toreo que debe estar en 2020 en todas las Ferias de iberia.
Calidad tuvo el quinto titular, un animal muy encastado hasta que duró. Bien lo saludó Luque a la verónica antes de un tercio de varas en el que fue ovacionado el picador «El Patilla», incluso sonando la música. Tras la primera tanda, el animal se rompió una mano y segundos más tarde la otra, saliendo el pañuelo verde desde el palco. El sobrero fue de El Torero, con el que anduvo cumbre a la verónica. Cumplió en el caballo, y a más fue la actitud del torero sevillano en la muleta: desde un principio llevó muy toreado al animal por ambos lados. Ya sin el ayudado, dejó toda una delicia de final de faena. Luquecinas finales, fallo con la espada en los dos primeros intentos, dejando ir la Puerta de los Cónsules, quedando todo en una oreja de peso.
Serio pero brusco y complicado fue el primero de Margé. Manseó en la lidia de Curro Díaz de inicio, empujando en el caballo aunque saliendo rápido de la suerte. Se dobló con torería en el inicio de faena el jiennense, cuajando muletazos de plena personalidad especialmente de la mitad de faena hacia adelante. Detalles toreros por abajo para rematar labor, matando de media estocada y descabello antes de saludar una ovación. Manso fue el cuarto, animal con el que Curro Díaz anduvo pleno de valor y raza, además de oficio. Con el capote quedó inédito, pero con la muleta se dobló toreramente con su oponente. Muy poderoso el jiennense, que cuajó muletazos de mucho mérito. Estocada bien colocada y ovación. El animal embestía bien y por abajo los dos primeros muletazos, pero en el tercero se le iba totalmente al pecho, por lo que aguantó Díaz.
Ovacionado a la entrega resultó Luis David ante el tercero, un animal con el que dejó momentos de raza por las complicaciones que tenía. El sexto fue un toro también muy serio pero escaso de fuerza. Pocas opciones de capote, no empujó en el caballo en un tercio de varas desacertado y, muleta en mano, sólo pudo dejar muletazos a media altura ante el flojo animal. No estuvo fino con la espada el mexicano, siendo silenciado tras aviso.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de Nimes. Primera de la feria de la Vendimia. Corrida de toros. Un tercio de plaza.
Toros de Robert Margé.
Curro Díaz, ovación y ovación.
Daniel Luque, oreja y oreja.
David Galván, ovación y silencio tras aviso.
INCIDENCIAS: Luque decidió salir por su propio pie y no a hombros aunque le correspondía hacerlo.