TEXTO: JAVIER FERNÁNDEZ-CABALLERO / FOTOGALERÍA: EMILIO MÉNDEZ
La corrida de Adolfo Martín llegaba, en la tarde de este miércoles 9 de octubre, a la quinta de abono de la Feria del Pilar en el coso de La Misericordia de Zaragoza. Alberto Álvarez, Manuel Escribano y Daniel Luque hacían el paseíllo.
Se le quedaba muy corto el primero de la tarde a Alberto Álvarez en el capote, pero luego tras el tercio de varas y el rápido tercio de banderillas, se le dejó a partir de la mitad de faena al torero maño. Obediente el animal cárdeno, fue noble detrás de la muleta de Álvarez, que lo pasaportó con entrega por ambos lados. Animal con recorrido y sin maldad en su embestida. De estocada trasera y de muy fea colocación mató el aragonés, lo que evitó el premio, que no lo concedió el palco tras petición. Ovación para el torero. Más parado y menos bueno que el abreplaza fue el cuarto, un animal de juego más apagado y con el que intentó cruzarse en el viaje Álvarez. Fue nuevamente ovacionado tras pasaportarlo.
Auguraba en los primeros tercios más de lo que finalmente fue el segundo, un animal al que banderilleó con voluntad Manuel Escribano pero se le cayó el último de los pares por algún problema con el arpón. Soso fue el animal en la faena de muleta del torero de Gerena, embistiendo sin transmisión. Se despistó además el animal a la hora de entrar a matar, haciéndolo de media estocada que tardó en hacer efecto. Silencio para el torero. Al portón de los sustos se fue Manuel Escribano a saludar al quinto, al que dejó una larga cambiada de rodillas y luego recetó un buen ramillete de verónicas, rematadas con una airosa revolera. Gran tercio de banderillas, ahora sí, protagonizado por el torero, que inició de forma explosiva su faena por cambiados en el medio de la plaza ante un animal encastado y que transmitió. Vibración en la primera de las series por la mano diestra; firmeza del sevillano en las series posteriores ante la transmisión del animal. Mató de estocada de rápido efecto tras aviso y el palco decidió no conceder la oreja de forma injusta.
Meció con dulzura el capote a la verónica Daniel Luque al tercero, un toro al que luego quitó Alberto Álvarez por gaoneras pero terminó arrollando la capa y desarmando al torero. Siempre sin dejarle pensar y obligando a embestir a un toro que se paraba en la mitad del muletazo impuso su ley Luque, la ley del toreo templado y elegante que consiguió por momentos. Fue silenciado tras alargarse el trance final, aunque el gusto de su toreo quedó patente. Con el toreo en la cabeza, fue Luque haciéndole frente al segundo de su lote, un sexto que tampoco valió para el triunfo. Que no le tocase la muleta fue pieza clave a la hora de ligar los muletazos con un toro claramente a menos. Mató de estocada atravesada.
FICHA DEL FESTEJO
Plaza de toros de La Misericordia, Zaragoza. Quinta de abono. Corrida de toros. Media entrada.
Toros de Adolfo Martín.
Alberto Álvarez, ovación y ovación.
Manuel Escribano, silencio y dos vueltas al ruedo.
Daniel Luque, silencio y ovación.